La declaración por parte de la Junta de Zonas de Especial Conservación (ZEC) cuenta habitualmente con defensores y detractores. En este caso, las tres ZEC aprobadas por la Consejería de Medio Ambiente a finales del años pasado en la provincia de Almería son ahora objeto de una propuesta del PP para que, independientemente de su nueva calificación medioambiental, se pueda mantener la actividad cinegética en su territorio.
Se trata de los parajes naturales de Tabernas, Sierra Alhamilla y Tabernas para los que el Partido Popular, a través de una Proposición No de Ley, solicita “a la Cámara autonómica que muestre su apoyo a la actividad cinegética que venía realizándose históricamente” en estos parajes.
Revisar el decreto
El PP solicita al Parlamento que inste a la Junta a pedir de forma urgente la modificación y revisión del decreto de noviembre de 2016 para “mantener la anterior protección y volver a la cabida anterior del paraje protegido y a sus antiguos linderos de cara a que se pueda "permitir de forma expresa la actividad cinegética en dichos parajes naturales".
Según los populares andaluces, la prohibición de la caza en estas zonas origina “un problema medioambiental y supone la desaparición de tareas tales como la realización de siembras de cereal, instalación de puntos de alimentación suplementaria, limpieza y mantenimiento de nacimientos de agua, caminos de acceso a masas forestales, el control de poblaciones animales que originan daños a la agricultura y accidentes en carreteras, la eliminación de jornadas laborales de guardería privada con la consecuente pérdida para agentes de Medio Ambiente, del Seprona y del Infoca de colaboradores altruistas”.
En el texto de la PNL firmado por la portavoz del PP de Andalucía, Carmen Crespo se asegura que “la cerrazón de prohibir la actividad cinegética supone perder todos estos trabajos que son desarrollados por las sociedades de cazadores de forma gratuita para la sociedad y que, dada la escasez de medios de todas las Administraciones públicas, supondrán un empeoramiento del hábitat”.
Superpoblación
La iniciativa, que cuenta con el apoyo de sociedades deportivas de caza, señala que la pérdida de gestión cinegética dio lugar, en su momento, a superpoblaciones de cabra montesa y jabalí en el Parque Nacional de Sierra Nevada, con la consiguiente “extinción en algunas zonas” de población de perdiz roja y conejo, al tiempo que hizo que algunas especies sufrieran enfermedades o “grandes mortandades” por su hacinamiento.
Asimismo, las asociaciones de cazadores ponen en duda la legalidad de prohibir la caza en propiedades privadas afectadas por la norma.
25.000 licencias
Desde el Partido Popular advierten además que las sociedades de caza, con 25.000 licencias en la provincia de Almería, son las “más interesadas en el equilibrio y el respeto al hábitat en su perpetuación y nunca actúan en perjuicio y extinción del medio”, si bien existe, según los populares, “desinformación y prejuicios ideológicos sobre estas entidades porque se desconoce su régimen de funcionamiento interior y su actividad. Es contraproducente prohibir la caza ordenada en un territorio", apuntan.
“La prohibición de la actividad cinegética en los parajes naturales del desierto de Tabernas, Sierra Alhamilla y Karst de Yesos de Sorbas originaría unas palpables consecuencias negativas desde un punto de vista conservacionista del medio por todo lo dicho, y también una disminución de la riqueza social, cultural y económica en la zona”, según los parlamentarios del PP andaluz.
Almería es la provincia que opta a más permisos de caza para la temporada 2017-2018 en los terrenos cinegéticos gestionados por la Junta. Así, cuenta con 1.673 concesiones para sus seis cotos públicos, cifra que supone un incremento de 200 sobre la anterior temporada.
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