Aguadulce: La posidonia goza de buena salud

El concejal de Turismo de Roquetas de Mar, Luis Miguel Carmona, ha dado a conocer los resultados de los primeros controles llevados a cabo en el arrecife de posidonia oceánica en la playa de Aguadulce y la nueva cartelería específica para informar de su existencia, “en la que se difundirá el valor de la formación natural, su ubicación y localización, así como las acciones humanas que la amenazan, como la pesca ilegal, así como indicadores con boyas rojas en el mar, que marcarán la zona de estudio e investigación del arrecife y de la pradera” , anuncia el concejal.

Carmona, acompañado del gerente de Aquatours y propulsor de la iniciativa, Fernando Orri, y el coordinador del Área de Playas, José Antonio Sánchez, valora muy positivamente los resultados, “ya que constituyen el punto de partida para  ir comparando año a año la evolución de las praderas”.

Además, según el concejal, “nos ha permitido conocer aún más la riqueza medioambiental del litoral roquetero y nos ha  permitido tener  una mayor concienciación sobre la necesidad de su conservación y preservación, ya que presenta un fuerte atractivo para desarrollar operativas de turismo ecológico y sostenible”.

Desde su aprobación por parte de Medio Ambiente el pasado noviembre, se han llevado a cabo varias mediciones en los dos puntos de control existentes, uno a en torno 4 metros de profundidad sobre el arrecife y otro a unos 10 metros, para seguir las mismas pautas del Programa Posimed.

Las inmersiones se han llevado a cabos por técnicos, instructores de buceo, científicos y voluntarios especializados y se han realizado trabajos de medición, tales como cobertura de la pradera, densidad y enterramiento de haces, longitud de la hoja y presencia de fauna indicadora, tales como nacras (Pinna nobilis) , erizos, pepinos de mar (holoturias) o plumero de mar (Sabella spallanzanii), comenta Orri. Además, se ha podido observar que la pradera situada a 4/5 metros es más densa y tiene una mayor variedad de fauna y flora que la que se encuentra a 10 metros, explica el experto.

“En la pradera del arrecife hemos detectado la presencia de otra fanerógama: Cimodocea nodosa y tenemos identificadas más de 60 especies diferentes de animales y algas. También hemos observado puestas de calamares en el arrecife de Aguadulce y de otros pequeños moluscos, y una gran presencia de nidos de tordos, unos peces que construyen sus propios nidos para colocar los huevos, al igual que lo hacen los pájaros. Es el macho de diferentes especies de tordos quien lo construye utilizando pedacitos de algas, conchas marinas y piedrecitas, que compacta con arena del fondo. También se han visto pequeños meros, falsos abadejos, pulpos y otra gran variedad de especies, enormes bancos de salpas y sepias”, detalla el Orri.

Otra cuestión importante es que la cantidad de erizos por metro cuadrado es normal, lo que es bueno ya que un exceso de estos animales marinos puede hacer peligrar la pradera y en los controles realizados en los dos puntos no se detectaron especies invasoras, lo que es muy bueno para la pradera, concluye Fernando Orri.

Cabe recordar que la Concejalía de Turismo, Comercio y Playas del Ayuntamiento de Roquetas de Mar impulsó la creación de una Estación de Control Arrecife de Posidonia oceánica y control de Nacras con una superficie de unos 200 por 70 metros, situada al principio de la playa de Aguadulce, junto a la empresa de turismo activo Aquatours , una iniciativa pionera ya que se trata de la primera estación de estas características gestionada por un ente municipal. Para ello, desde la Concejalía se solicitó a la Delegación de Medio Ambiente la integración de este proyecto en el Programa Blue Life, antiguo Life Posidonia Andalucía, de la Red Posimed España.

La colaboración entre instituciones asegura que la estación de seguimiento utilice la misma metodología de muestreo de posidonia oceánica y de control de nacras que es utilizada por la Red Posimed de Andalucía, de manera que los datos generados se puedan incorporar a la información obtenida por ésta y así conseguir mejor información para conocer el estado, las posibles perturbaciones y garantizar una adecuada gestión y conservación de este hábitat protegido.

De hecho, los primeros estudios se llevarán a cabo de forma conjunta entre los gerentes de Aquatorus, que llevan varios años colaborando con la Red Posimed, y voluntarios de la Red.

Desde el Ayuntamiento tienen claro que “la mejor apuesta que podemos hacer es la de poner en valor nuestro patrimonio natural” comenta Carmona, que a su vez hace hincapié en la importancia que supone la estación de control, “ya que para preservar y proteger un espacio es muy importante conocerlo, por un lado, y darlo a conocer, por otro, todavía hay mucho camino por recorrer en la difusión y concienciación de nuestros espacios naturales, y más aún en el medio marino, que es desconocido para todos a pesar de que en el litoral almeriense contamos con un verdadero tesoro como es la posidonia”.