Sala intravítrea para realizar tratamientos de oftalmología sin necesidad de quirófano

El área de Oftalmología del Hospital de Poniente dispone desde hace pocos meses de una nueva sala destinada a poder administrar tratamientos que antes requerían la utilización de un quirófano.

Principalmente, las patologías que requieren este tipo de tratamientos intravítreos, es decir, a través de una inyección en el ojo, son la degeneración macular asociada a la edad y también la retinopatía diabética.

Se da la circunstancias de que ambas adquieren un carácter crónico con el añadido de que la no administración del tratamiento durante un periodo concreto puedo acabar derivando en ceguera por lo que el estricto control de las fechas de tratamiento así como su correcta administración es fundamental para los pacientes.

Sala ‘blanca’
El responsable de Oftalmología del Hospital de Poniente y HAR El Toyo, Jesús López Andrade, explica como “la administración de estos tratamientos requieren una sala estéril para evitar el riesgo de una infección que podría provocar la ceguera. Y mientras en Europa se optó por hacerlo en quirófanos, en EEUU y Canadá lo hicieron en consultas. Y los estudios han demostrado que la seguridad es la misma en ambos casos por lo que hemos apostado por hacerlo en esta consulta que es una sala ‘esteril’ o sala ‘blanca’ podríamos decir”.

Y con esta iniciativa lo que se consigue, entre otras cosas, es poder liberar horas de quirófano para que se utilice en otras intervenciones que requieren obligatoriamente el uso de los mismos.

Según datos ofrecidos desde el área de Oftalmología del Hospital de Poniente, el año pasado se administraron un total de 1.454 tratamientos intravítreos y para este año se estima que pueda sobrepasar la cifra de los 1.700.

No obstante, la disposición de esta sala permite darle mayor agilidad y rapidez a la administración de los mismos al estar exclusivamente disponible para esta cuestión.