Recaudan fondos para paliar el calor de las aulas con ventiladores

Pese a que la inestabilidad climatológica durante lo que llevamos primavera está dando una tregua a estas alturas del año, lo cierto es que se avecina un periodo de altas temperaturas que trae como consecuencia, entre otras cosas, una situación de calor que convierte en un auténtico suplicio el tramo final del periodo lectivo en los centros educativos.

De hecho, ya el año pasado se vivió una ola de calor y una situación en las aulas tan sofocante que la consejería de Educación de la Junta de Andalucía emitía una circular autorizando a los padres a no llevar a sus hijos al colegio por este motivo durante los últimos días de clase.

Necesidad

La situación vivida durante el curso pasado ha sido el motivo que ha movido a los miembros de la AMPA del colegio Loma de Santo Domingo en El Ejido a conjurarse para tratar de paliar esta situación de altas temperaturas que padecen sus hijos en las aulas en la medida de sus posibilidades. “El año pasado fue un verano muy duro, con mucho calor. Y nuestras aulas no están preparadas para ese calor”, explica Míriam Gómez, presidenta de la AMPA, quien añade que “ahí surgió la idea de que todo lo que consiguiéramos recaudar este año sería para intentar climatizar las aulas”.

La iniciativa supone, en la práctica, atender una necesidad que institucionalmente no está cubierta ya que el Loma de Santo Domingo es uno de los muchos centros educativos que está fuera del plan de choque anunciado por la Consejería de Educación de la Junta para hacer frente a esta situación.

Y todo eso pese a que, según explica Míriam Gómez, “nuestro centro es muy antiguo y tenemos unas poquitas aulas que tienen un ventilador pero la gran mayoría están sin nada”.

Contactos

La presidenta de la AMPA confirma que desde el centro educativo se han puesto en contacto con las instituciones para pedir soluciones a esta problemática.

Sin embargo, confiesa que “desde Educación se remiten al plan a nivel andaluz y desde el Ayuntamiento es algo que no están obligados a hacer. El mantenimiento sí pero eso es como un extra que no se les puede pedir”.

De este modo, es esa doble respuesta la que lleva a Míriam Gómez a constatar que, en su opinión, “las administraciones deberían poner de su parte” pero es consciente de que “si esperamos a las administraciones, puede llevarnos años. Y nuestros niños necesitan soluciones ya”.

Por eso, ante tal circunstancia, la solución viable y factible que tienen sobre la mesa es la de colocar unos ventiladores que correrían por la propia cuenta y riesgo de la AMPA y que se puede realizar al ser una infraestructura que puedan instalar sin recibir ningún tipo de impedimento por parte de las administraciones. “Si se fueran a instalar aires acondicionados, habría hecho falta autorización, en primer lugar, por el tema de los cuadros eléctricos, que no están preparados para eso, además del gasto eléctrico que sería también más elevado. Pero con los ventiladores el aumento del gasto es mínimo”.

No obstante, no se trata de unos ventiladores cualquiera puesto que tienen que contar  “con garantías de seguridad y de que son perfectamente aptos para poder estar en un centro escolar”, explica la presidenta de la AMPA.

Pero esto último tampoco es un problema para unos padres y madres que ya conocen también el presupuesto para el montaje de unos ventiladores que saldrían por “algo más de 100 euros cada uno ya montados”, apunta Gómez.

No obstante, será imposible atender a todas las aulas a corto plazo ya que el estudio elaborado por los técnicos instaladores establece que necesitarían un total de 29 ventiladores en función de las dimensiones de las aulas con las que cuenta el centro.

Convivencia

Una vez definido el objetivo de colocar los ventiladores y conocido el coste de los mismos, desde la AMPA se han puesto manos a la obra para tratar de recaudar fondos con dos grandes eventos principales, la fiesta que realizaron en Navidad y una jornada de convivencia con paellada, sorteo y actuación musical que realizaron el pasado viernes.

Y todo ello con el objetivo de poder instalar los primeros ventiladores en el centro antes de que el calor apriete con más fuerza.