La Paz de Las Alpujarras recupera la historia 518 años después

Corría el año 1570 cuando la Corona española intentó obligar a los moriscos a acatar los mandatos que les llevarían a abandonar su cultura, su religión y sus bienes. Aquello provocó un levantamiento que derivó en una guerra, hasta que Juan de Austria fue enviado para someter a los levantiscos.

518 años después los vecinos de Padules se trasladan a aquella época, recuperan vestimentas, culturas y usos gastronómicos y escenifican uno de los episodios más importantes con la recreación de la Paz de Las Alpujarras.

A escena
Este pasado fin de semana el pueblo revivía aquel episodio que cambió la historia de la comarca. Los vecinos se meten en la piel de cristianos y moriscos, representan con pasión un pasaje de la historia que les convirtió en protagonistas y, con ello, atraen a cientos de personas que viven en primera persona la recreación.

Durante el sábado y el domingo pasear por Padules era retrotraerse a una época tan lejana que quedó durante años fuera de la memoria colectiva. El esfuerzo de todo un pueblo, del Ayuntamiento de la localidad, de la Diputación como ente colaborador y del especialista en sastrería histórica Francisco Martínez Botella, logra el impacto de vivir la historia en directo y conocer lo que allí ocurrió hace más de quinientos años.

Viaje en el tiempo
Casi un centenar de personas participan activamente en la recreación histórica. Lo hacen con las vestimentas que eran comunes en 1570, en la mayoría de los casos elaboradas por ellos mismos; meses de trabajo minucioso para que asistir a la representación de la Paz de Las Alpujarras sea casi como estar presente en aquel momento.

En torno a ellos el resto de los vecinos y cientos de personas llegados desde toda la provincia y de otras zonas del país, atraídas por un espectáculo diferente, lleno de contenido y de significados. Padules quiere que se recuerde ese momento en el que la paz y la seguridad se estableció en su suelo. Vivir la historia tiene la importancia de saber de dónde venimos.