“Vivimos en una sociedad que no acepta la muerte y si es de un niño aún menos”

No cabe duda de que afrontar algo tan emocionalmente potente como es la pérdida de un hijo es una situación que genera reacciones diferentes e imprevisibles por parte de aquellas personas a las que les toca pasar por esta experiencia.

Y es por ello por lo que desde el Hospital de Poniente se ha organizado un curso sobre pérdida y duelo perinatal. “Nos referimos con duelo perinatal a cualquier pérdida que pueda ocurrir durante el embarazo, ya sea al principio de la gestación, en mitad o al final, o después de nacer el bebé en los primeros días de vida”, explica Fernanda López, pediatra del Hospital de Poniente especialista en Neonatología.

Objetivo

El curso se ha organizado en colaboración con el colectivo sin ánimo de lucro ‘Red El Hueco de mi Vientre’, una red solidaria de apoyo a familias que han sufrido una pérdida perinatal, así como a los profesionales que las atienden. Y es que, según explica Fernanda López, “lo que buscamos es tener las herramientas y la formación para mejorar la atención emocional que reciben los padres que viven una situación así en cualquier momento del embarazo o tras el nacimiento. Lo que queremos es humanizar la asistencia a las familias”.

Y es por esta motivación por la que el curso ha tenido tan buena acogida puesto que al final han sido total de 60 los profesionales del centro hospitalario que han asistido a esta cita.

Sin duda, se trata de un asunto bastante importante y en el que hay mucho camino por recorrer puesto que, según reflexiona la doctora López, “vivimos en una sociedad que no acepta la muerte en general y si es de un niño aún menos”.

Soledad

Una de las cuestiones a las que tienen que hacer frente los padres que pasan por una situación de este tipo es la de vivir su duelo en silencio y en soledad. “Es un duelo que puede ocurrir en cualquier momento. A veces es algo esperado porque los padres saben que hay algún problema durante el embarazo y se preparan para esa situación. Pero otras veces no. Hay veces que una pérdida, en el primer trimestre incluso, un aborto, una mamá lo puede vivir con una sensación de que he perdido a mi hijo. Y en eso muchas veces, que es el problema del duelo perinatal, los padres nos transmiten que muchas veces se sienten solos”, apunta López.

Por tanto, uno de los objetivos a conseguir con esta formación es tratar de facilitar a los padres que puedan realizar su duelo de la forma que requieran. “Es algo necesario como ocurre con cualquier pérdida”, indica Fernanda López.

Poder decidir 

En la línea de facilitar a los padres que puedan escoger como vivir el proceso de duelo, la doctora López explica que “antes se hacía una medicina muy paternalista en la que el médico lo decidía todo y ahora la tendencia es lo contrario, los padres pueden tomar sus decisiones de si quieren ver o no a su hijo fallecido, si quieren cogerle en brazos o cuanto tiempo quieren estar con él en bracitos para despedirse. Todo eso nosotros lo podemos cuidar con un poco más de sensibilidad en este sentido”.

Asimismo, esta pediatra especialista en Neonatología cuenta como “muchas veces se crean recuerdos. A veces los padres no piensan en eso, sobre todo si es algo inesperado. Nosotros tenemos que saber acompañarles en el sentido de si quieren hacerse fotos con su bebé, por ejemplo. En el hospital podemos hacer una cajita con las huellas, un mechón de pelo, la pulserita que se le pone al bebé al nacer. Evidentemente, si ellos quieren”.

No obstante, se trata de un proceso en el que tanto los padres como los profesionales afrontan una gran carga emocional porque, como indica Fernanda López, “estamos en un sitio donde recibimos vida y encontrarnos con lo contrario es un poco emocionalmente demasiado intenso para nosotros mismos”. De ahí que la formación para afrontarlo sea también crucial.