El encargado de una gasolinera detenido por robar 50.000 euros

La Guardia Civil investiga a un ex militar empleado en una estación de servicio del municipio de Vícar, ubicada en la travesía urbana de la nacional 340, por la presunta apropiación indebida de unos 50.000 euros procedentes de la recaudación del negocio. Los agentes arrestaron a M. A., un varón de nacionalidad española, en una operación de entrada y registro domiciliario desarrollada el pasado lunes en Roquetas de Mar, según fuentes jurídicas consultadas por LA VOZ DE ALMERÍA.

El sospechoso compareció durante la mañana de ayer en el Juzgado de Instrucción número Tres de Almería, en funciones de guardia desde el pasado martes. El empleado habría aprovechado un puesto de confianza como encargado de la estación de servicio (no era propietario del local) para acceder al dinero de la caja registradora y ‘distraer’ presuntamente cantidades económicas de la recaudación.

La instrucción analiza el método utilizado para la camuflar la ausencia del dinero. Se investiga particularmente un supuesto ataque a punta de navaja simulado para esconder la apropiación de una importante cantidad en metálico. El responsable debía ingresar el dinero de la estación de servicio en una sucursal bancaria ubicada a unos pocos cientos de metros del negocio, ubicado en la larga avenida de la carretera nacional a su paso por la localidad de Vícar. Sin embargo, aseguró haber sufrido un asalto con un arma blanca que le dejó sin la bolsa.

Investigación
El ex militar fue atacado presuntamente por un varón de mediana edad y origen magrebí. Según su versión, intentó evitar el atraco y sufrió cortes en la mano producidos durante el presunto forcejeo con el delincuente. El dinero nunca se ingresó en el oficina bancaria. Tampoco quedó rastro alguno del supuesto ladrón (el perfil ofrecido es muy común en la comarca) ni grabaciones de las cámaras de seguridad del entorno que pudieran ayudar a esclarecer el suceso y recuperar el dinero.

La investigación desarrollada por la Guardia Civil pronto se escoró hacia una presunta simulación de delito, una estrategia trazada para ocultar el robo del efectivo de la gasolinera en la que trabajaba como encargado desde hacía años. La Benemérita sospechaba que M. A. se autolesionó para dar veracidad a su denuncia del atraco callejero, según fuentes jurídicas. Los cortes existían, pero eran autoinfligidos, según la versión ofrecida ante la autoridad judicial.

Los agentes del Instituto Armado trataron de reconstruir los pasos del encargado de la gasolinera y consiguieron indicios de una presunta apropiación indebida. Ahora se indaga si el delito pudo producirse de forma continuada con la desaparición de pequeñas cantidades, gracias a la facilidad del encargado para gestionar los fondos obtenidos con las ventas diarias.

La Guardia Civil ha entregado al juzgado 4.000 euros en metálico recuperados durante el registro en la vivienda de Roquetas de Mar. El dinero, presuntamente desviado de la recaudación de la gasolinera de Vícar, estaba escondido en el inmueble