Los grupos vecinales de El Ejido en redes sociales se han convertido en un hervidero los últimos días a causa de las cartas que están recibiendo los propietarios de perros del municipio con las que el Ayuntamiento recuerda la obligatoriedad de tener que hacer una prueba de ADN a sus canes cuyo perfil genético se registra con el fin de “mejorar la convivencia” y “dificultar el abandono”. La mayoría de estos ciudadanos han recibido esta medida como una propuesta con afán recaudatorio ya que el coste de la misma es de 30 euros, unas palabras que han recogido desde Izquierda Unida.
Y así lo ha denunciado el portavoz de del grupo municipal IU en el municipio, Juan Antonio López Escobar, que acusa al Ayuntamiento de “hostigar a los propietarios de perros para que lleven a cabo estas pruebas”, y añade que “esto no hace sino demostrar el fracaso de la medida como ya expusimos en el Pleno y en reiteradas ocasiones: los propietarios irresponsables, los que no cumplían con la ley que ya había vigente que obligaba a tener a sus animales vacunados y con chip han hecho caso omiso a esta medida, y los responsables se sienten acosados y señalados, viendo como a pesar de haber cumplido sus gastos se incrementan y son señalados por el consistorio como culpables del estado lamentable de suciedad del municipio por culpa del Equipo de Gobierno, donde las heces de las mascotas son solo la punta del iceberg”, señala Juan Antonio López Escobar.
Escándalo
Desde Izquierda Unida El Ejido recuerdan que la empresa contratada por el Consistorio para el análisis de las heces de los perros es propiedad de Enrique Perigüell, quien se vio obligado a dimitir de su concejalía por el PP en Xátiva precisamente por un escándalo relacionado con ese negocio.
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