Tanto la calidad como la potencia con la que el agua llega a las viviendas es una de las principales quejas que provienen de los vecinos de los núcleos costeros de El Ejido. Problemática que se agrava todavía más durante los meses de vacaciones en los que se multiplica la población.
Por este motivo, desde el consistorio ejidense se espera que las obras de impulsión de la Desaladora del Campo de Dalías hasta el depósito de Balerma, promovidas por Aguas de El Ejido y con un presupuesto total de 614.835 euros, sean las que acaben permitiendo que se pueda garantizar el suministro de agua de mejor calidad a la franja costera existente entre Balerma y Almerimar.
El alcalde de El Ejido, Francisco Góngora; el concejal de Obras Públicas, Mantenimiento y Servicios; José Andrés Cano; el edil Ángel Escobar; y el presidente de la Junta Local, Antonio Gómez, han visitado los trabajos que se están llevando a cabo en la zona de El Canalillo.
Y ahí han podido comprobar como el proyecto consiste en la ejecución de la estación de impulsión anexa a la desaladora; las conexiones a la conducción de Acuamed; y el tendido de la conducción municipal hasta los depósitos de cabecera, incluyendo la ejecución de una obra de hinca bajo la carretera nacional 340.
Proyecto
Según indicaciones de Acuamed, se va a disponer de una conducción de diámetro de 500 mm, destinada a riego, que actualmente no ha entrado en servicio y de la que temporalmente se va a hacer uso, una vez finalizadas las obras. No obstante, el alcalde de El Ejido, Francisco Góngora, ha señalado que “la capacidad de las instalaciones proyectadas permitirían en el futuro la dotación de volúmenes mayores, permitiendo el abastecimiento de agua potable a nuevos crecimientos y a otras zonas dominadas por el depósito grande de Balerma, como Guardias Viejas y Almerimar”.
Por otro lado, el alcalde ejidense, Francisco Góngora ha explicado que “el objeto de esta actuación es el de garantizar el suministro de agua desalada a la zona dominada por el depósito de Balerma, a la franja costera, mejorando de esta forma sustancialmente la calidad del agua potable suministrada”.
Y, en este sentido, ha recordado que “se trata de una actuación muy necesaria y urgente debido al constante proceso de intrusión marina en el acuífero que está provocando que las aguas extraídas en la captación de abastecimiento urbano del Pozo de la Cuesta de los Alacranes estén aumentando sus niveles de salinidad. De manera que, una vez analizadas las posibilidades de sustituir el agua de este pozo por otra fuente de suministro alternativa se ha determinado que la mejor opción viable es el suministro de agua de mayor calidad directamente desde la Desaladora”.
Conexiones
Hay que recordar que la desaladora es una gran infraestructura cuya construcción supuso una inversión de más de 130 millones de euros con el objetivo del suministro de agua potable para un total de 300.000 personas y de agua para riego a 8.000 hectáreas de cultivos en una importante extensión de la comarca del Poniente.
Sin embargo, se trata de una instalación que ha estado trabajando a un porcentaje bastante bajo dentro de todo el potencial de caudal que podría albergar.
Y, además, siguen siendo necesarias una serie de infraestructuras como estas conexiones y depósitos que va a llevar a cabo Aguas de El Ejido para permitir la llegada del caudal de agua hasta los hogares y zona de riego.
Asimismo, el municipio de Adra también tiene en marcha trámites para poder contar con dos hectómetros de esta agua desalada.
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