El municipio de Cuevas del Almanzora no contará con nuevas explotaciones porcinas. Es lo que ocurrirá, al menos, durante los próximos meses, ya que el Ayuntamiento cuevano ha aprobado una ordenanza en la que se especifica como “medida cautelar” la “suspensión de ordenación de trámites” para nuevas licencias, permisos y autorizaciones para actividades y explotaciones ganaderas de uso industrial.
El acuerdo, que fue tomado por unanimidad de los concejales, se enmarca en los trámites para la aprobación de una ordenanza reguladora de “vertidos de residuos de origen animal y ganadero” así como de “implantación e instalación de actividades ganaderas”.
Medida provisional
Tal y como reza la propia ordenanza se trata de una suspensión “provisional” mientras se regulan las condiciones para la instalaciones de las industrias de este tipo que así lo requieran. Así lo ha asegurado el alcalde cuevano, Antonio Fernández, quien ha detallado que esta regulación tiene “mucho que ver con la protección del medio ambiente” ya que “no queremos un problema con este tema” en el municipio. Por ello, el regidor ha explicado que desde Cuevas del Almanzora “no cerramos la puerta a que una industria de ese tipo se instale en nuestro municipio” pero que “vamos a regularlo para que se instalen las necesarias”.
En este sentido, Fernández entiende que “el fondo de la ordenanza” no es otro que “tener una herramienta municipal para regular este tipo de instalaciones” al igual que han hecho otros municipios. “No hemos descubierto nada nuevo”, subraya el alcalde.
Problemas cercanos
La instalación de explotaciones está suponiendo en algunas localidades de la provincia un quebradero de cabeza para muchos vecinos, que ven cómo estas instalaciones se instalan o amplían hasta quedar a escasos metros de sus casas.
Uno de los casos que ha tenido más repercusión en los últimos meses ha sido el de los vecinos de Gacía, en Huércal-Overa. Los vecinos de esta pedanía e incluso de otros municipios cercanos se han organizado bajo la plataforma ‘Stop macro granjas Huércal-Overa’, que utilizan como altavoz para denunciar su situación. Desde esta asociación han denunciado en varias ocasiones que las explotaciones burlan la ley para realizar ampliaciones y que la contaminación que generan es presuntamente mayor a la permitida.
Una economía baja en carbono
Dentro de la protección medioambiental y además del control de las granjas, el Ayuntamiento ha sido beneficiario de una subvención de Fondos Europeos destinada a favorecer el paso a una economía baja en carbono. Tal y como adelantó este periódico el proyecto, que contará con 2,4 millones, garantizará un crecimiento basado en la sostenibilidad. Dentro del proyecto se plantea la interconexión del Canal de Remo pasando por el núcleo urbano hasta la costa a través de un carril bici de más de 15 km de longitud, así como otro tipo de medidas con la mejora de carreteras y el carril-bici como protagonistas.
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