La prostitución sigue siendo un tema del que nadie quiere hablar

La prostitución es una lacra social con la que hay que acabar y para ello es imprescindible acabar con el “mal llamado cliente”, que debería llamarse “prostituidor”.
Este ha sido, grosso modo, el tema en torno al cual han debatido en Almería expertos de toda Europa y que convocaba a más de 200 personas en la Jornada Internacional sobre Prostitución y Trata de Mujeres que tuvo lugar ayer en el colegio de Abogados de Almería.
Durante la inauguración, la presidenta de la Comisión para la Investigación de los malos tratos a mujeres, Susana Martínez, destacaba que la prostitución “es un tema del que nadie quiere hablar” y que, socialmente, se ve “como un servicio más al ciudadano”. Por ello reclamaba compromiso, para que se debata sobre el asunto y se sepa que “la responsabilidad está en el prostituidor, en el cliente”.
Por su parte, Asunción Miura, de la Coalición Internacional contra el Tráfico de Mujeres, apuntaba que la violencia de pareja fue también un tema tabú y, sin embargo, hoy España es modélica por medios, ayudas y servicios; algo que no sucede con el tema de la prostitución.
Para ella, “las mujeres son víctimas y erradicar la prostitución implica ir a las causas. “Que el cliente no sea repudiado, como lo es el maltratador, no es de una sociedad avanzada”, dijo Miura, quien también señaló que “Europa es un gran burdel”, lo que no sucedería si se acabara con la demanda.
La ponente pidió que la Ley de Medidas contra la Violencia tenga presente la prostitución y que penalice y sancione al prostituidor, al cliente. Según Miura, “tiene que haber voluntad política” para acabar con la prostitución.
La organizadora del evento, la presidenta de Asociación para la Atención Integral de Mujeres en Riesgo Social (Aimur), Mercedes Díaz, explicaba a LA VOZ DE ALMERÍA que “la gente tiene que saber qué hay detrás de la prostitución y que si aunamos fuerzas podemos acabar con esta lacra social”.
Apunta que entre 600 y 800 mujeres aproximadamente se dedican a ella en la provincia. Con respecto al perfil de la mujer que se dedica a la prostitución, señalaba que “un 90% o 95% son inmigrantes, menores de 45 años con hijos o familiares a su cargo y sobre todo en los últimos años la población rumana ha crecido mucho”. Sobre la Ordenanza Cívica que se tramita en el Ayuntamiento de Almería, Díaz afirma que “siempre y cuando sea para perseguir la demanda y el proxenetismo estamos de acuerdo, lo que no se puede hacer es desplazar a las mujeres a sitios donde no se las vea, porque eso hace que el problema se agrave y su situación será más peligrosa de lo que ya está siendo”.