Un incendio en la planta de residuos agrícolas afecta a los invernaderos

Plantas quemadas, otras cubiertas de ceniza, hierros retorcidos por el calor, ventanas de refrigeración inutilizadas y un espeso humo que rápidamente afecta a la visibilidad y a la capacidad de respirar. Ese es el panorama que había ayer en las explotaciones agrícolas colindantes a la planta de tratamiento de residuos agrícolas situada en el paraje llamado El Algarrobo, en el municipio de La Mojonera.

La causa: el incendio producido a las nueve y media de la mañana en las instalaciones de la planta del Consorcio La Albaida y que gestiona la empresa Verdia; el cual, a pesar de que fue controlado sobre el mediodía, al cierre de esta edición todavía no había podido ser extinguido debido al fuerte viento que hubo durante todo el día en la zona. Según relata Juan Antonio Marín, un agricultor de 28 años y propietario de uno de los invernaderos afectados; “el fuego empezó en la zona de levante de la planta y sobre la una y media del mediodía subió hacia arriba y comenzó a afectar a nuestros invernaderos. El mío es de una hectárea, pero habrá afectadas alrededor de 50 hectáreas en total”. Este jóven empresario agrícola se queja de que “el helicóptero ha dado 6 o 7 viajes y han visto que no podían hacer nada, pero deberían haber refrescado el terreno que hay junto a nuestras tierras y así evitar que se hubiera quemado el invernadero”.

Como Juan Antonio, varios agricultores de la zona lamentan que “el año pasado, en septiembre, también ardió la planta. Son muchas casualidades porque siempre es lo mismo. Acumulan matas durante todo un año y cuando no hay espacio para más plantas, mira tú por donde se produce un incendio, arde todo eso y nuestros invernaderos se ven afectados”.

El malestar entre los propietarios agrícolas es patente y consideran que “la planta de reciclaje no debería estar ahí. Eso o que de verdad gestionen los residuos de una manera correcta, no llevándose el dinero sin hacer lo que deben y perjudicando a los agricultores como lo están haciendo”.

La planta tiene alrededor de una década de vida y se creó para que los agricultores de Vícar, La Mojonera y Roquetas de Mar, cuyos ayuntamientos componen el Consorcio; pudieran llevar hasta allí las plantas de sus explotaciones una vez acabada la campaña. Situación que también es criticada por los agricultores, ya que “si cada uno elimináramos los residuos, como hacíamos antes, en vez de acumular toneladas y toneladas, seguro que no habría ningún incendio”. Verdia es la empresa que tiene adjudicada la gestión de la planta y según dice el alcalde de La Mojonera y presidente del Consorcio, José Cara, “cumple con todas las medidas de prevención y aislamiento de las zonas de la planta para que cuando se produce una situación como ésta, pueda garantizarse la seguridad y reducirse los riesgos. Además, hay bocas de riego por todas las instalaciones para que puedan actuar los bomberos. Lo que ocurre es que en esta ocasión el fuerte viento ha dificultado el trabajo, pero no hay que lamentar daños”.