La práctica desaparición de aves acuáticas en ciertas lagunas de Punta Entinas preocupan a vecinos y ecologistas que creen haber dado con la causa de este problema: la aparición de carpas, un pez invasor muy voraz y que alcanza gran tamaño.
“Hace tiempo que venimos observando la disminución de la presencia de aves, en la pequeña laguna que se encuentra en la entrada del Paraje Natural de Punta Entinas, desde la Urbanización de Roquetas, denominada La Gravera, -llamada así porque tuvo su origen en la extracción de áridos para invernaderos-”, señala el Grupo Ecologista Mediterráneo (GEM) en un escrito dirigido a la Delegación de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible.
En el documento, aseguran que “recientemente hemos observado la presencia de carpas de gran tamaño, a las que consideramos responsables de lo expuesto anteriormente. Carpas que por el tamaño que han alcanzado se deben de haber introducido hace años, aunque sus efectos empiecen a ser más notorios actualmente”.
Fochas y malvasías
Durante los últimos años, en esta laguna han nidificado numerosas especies de aves acuáticas, tales como gallinetas, fochas, azulones y malvasías, entre otras, “sin embargo, este año no hemos visto ni un pollo de estas especies, las malvasías han desaparecido y la presencia de fochas y azulones, antes presentes en gran número se ha vuelto testimonial”, asegura el GEM.
En opinión del colectivo, este lugar es muy interesante, ya que se puede ver como muchas familias con niños acuden a el a dar de comer a los patos, “lo que consideramos una forma interesante de entrar en contacto con la naturaleza y de educación ambiental, que además evita que se presione en otros puntos más sensibles. Asimismo, ese aporte extra de alimentación es lo que permitía, en parte, la presencia de un considerable número de ejemplares”.
Ganan las carpas
Pero, a día de hoy la competencia por la comida que se puede obtener de forma natural en la laguna y ese aporte, sobre todo de pan, de los niños, “se ha decantado a favor de las carpas, especie introducida e invasora, y de no tomarse medidas es posible que las pocas aves acuáticas que quedan se vean desplazadas a otros lugares”.
Echarlas al agua para pescarlas
Todo apunta, según explica el GEM, a que la introducción de carpas se llevan a cabo por pescadores, en muchas ocasiones provenientes de países del este, que están habituados a la pesca y consumo de estos peces. Pero esta introducción, independientemente de donde se haga, es ilegal, y especialmente dañina en espacios con otras especies de peces y aves, ya que la presencia de carpas acaba eliminando o desplazando a las poblaciones autóctonas.
El grupo ecologista considera que “se deben de tomar medidas para, dentro de lo posible erradicar a esta especie invasora, sobre todo en los espacios protegidos, que consideramos deben de ir en el doble sentido de erradicar las poblaciones existentes de carpas y de evitar que se sigan soltando por parte e los pescadores”.
“Recientemente tuvimos una discusión con pescadores en la Cañada de las Norias, que nos decían que las habían introducido ellos para poderlas pescar después, y que además hacían un favor a la Administración pescándolas porque así reducían su número. Así justificaban su presencia en ese lugar, y claro, después de señalarles la ilegalidad de todo esto, siguieron pescando sin más”, relatan desde el GEM.
Sanciones ejemplares
Para conseguir esto, en su escrito a la Delegación señala que “consideramos que se debería de llevar una campaña de sanciones ejemplares, tanto a los que sueltan las carpas, y ya que esto es difícil, a los que las pescan, sobre todo teniendo en cuenta que en algunas zonas en las que se localizan un elevado número de pescadores, como la Cañada de las Norias, la pesca esta prohibida”, insisten desde el GEM.
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