El joven fallecido en el centro de menores fue atendido por un ataque cardíaco

La justicia investiga la muerte este lunes de un joven de 18 años, que permanecía ingresado en el centro de menores ‘Tierras de Oria’ después de que se aplicaran los protocolos de contención ante una “situación de agresividad” y “violencia”. Según fuentes de la investigación, el joven había protagonizado una “grave” alteración, por lo que se procedió a contenerlo, con el fin de evitar que se hiciera daño o que lo causara a otras personas. En ese momento, una vez controlado, pero aún en un estado de gran excitación, sufrió un ataque cardíaco.

El interno fue atendido por el médico del propio centro, así como por el de Oria y los del servicio de emergencias que se desplazaron en helicóptero, sin que pudieran “sacarlo adelante”. Se ha ordenado la autopsia del cadáver a fin de conocer las causas de la muerte, mientras que el Juzgado de Instrucción Único de Purchena ha abierto una investigación para esclarecer las causas del fallecimiento. Desde la Consejería de Turismo, Regeneración, Justicia y Administración Local de la Junta de Andalucía han confirmado que el fallecimiento, que tuvo lugar sobre las 15,30 horas, por el que se ha ordenado la autopsia del cadáver a fin de conocer las causas.

Protocolo de contención

Tras una polémica surgida en torno a las contenciones de los jóvenes ingresados años atrás, el director del centro, Manuel Madrid, aseguró en 2015 que el uso de la fuerza “se limita al estrictamente necesario para contener episodios violentos”, de modo que en ocasiones se ha de “recurrir a la contención mecánica”. En este supuesto, se procede a inmovilizar al menor en la cama mediante correas de cuero durante el tiempo necesario para que éste se calme y no llegue a producir daños a los demás o a sí mismo”.

“Es verdad que se aplican medidas de contención y es verdad que si los niños intentan agredirse entre ellos o a los profesores hay que meterse y parar la pelea”, comentó el director del centro de menores orialeño, quien al mismo tiempo hizo hincapié en que “se realizan controles muy exhaustivos por parte de todas las administraciones y que nunca ha habido problemas”.