Javier Pajarón
22:13 • 07 oct. 2011
La crisis económica hace mella en los recursos más básicos del ciudadano, casa y comida. Un informe presentado ayer por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) pone cifras al drama de muchos almerienses y eleva el número de desahucios y embargos a índices desconocidos hasta hoy, al menos desde que existen registros estadísticos de esta naturaleza.
En sólo medio año, la provincia de Almería contabiliza 650 lanzamientos, dicho de otra manera, órdenes judiciales para retirar una propiedad, generalmente un inmueble. Esto supone que cientos de familias se quedan sin techo, ya sea al perder la propiedad de su casa, ya sea al ser expulsados por no poder afrontar el pago del alquiler. Se trata de una intervención de fuerza judicial (acude una comisión) en la que no es infrecuente la presencia de agentes policiales si la vivienda continúa habitada y un cerrajero para evitar una posterior "okupación".
La curva de la estadística de desahucios se dispara sin solución desde los inicios de la crisis en 2008 y 2009. En estos cursos el registro judicial anotaba en la provincia de Almería entre 300 y 400 lanzamientos de propiedades, una cifra ya de por sí elevada. Sin embargo, el problema se agudiza y en 2010 la estadística provincial se dispara a más del doble, 840 casos de desahucio. Y lejos de mejorar, en el primer semestre de 2011 las cifras rondan el récord y dibujan una previsión de 1.300 casos a final de este año en la provincia de Almería. Es decir, un 75 por ciento de incremento desde el inicio de las crisis económica.
El dato nacional tampoco escapa a la situación y marca ya un máximo histórico en el segundo trimestre del curso, con un 21,2 por ciento más que en todo 2010 y más de 16.000 lanzamientos judiciales.
En sólo medio año, la provincia de Almería contabiliza 650 lanzamientos, dicho de otra manera, órdenes judiciales para retirar una propiedad, generalmente un inmueble. Esto supone que cientos de familias se quedan sin techo, ya sea al perder la propiedad de su casa, ya sea al ser expulsados por no poder afrontar el pago del alquiler. Se trata de una intervención de fuerza judicial (acude una comisión) en la que no es infrecuente la presencia de agentes policiales si la vivienda continúa habitada y un cerrajero para evitar una posterior "okupación".
La curva de la estadística de desahucios se dispara sin solución desde los inicios de la crisis en 2008 y 2009. En estos cursos el registro judicial anotaba en la provincia de Almería entre 300 y 400 lanzamientos de propiedades, una cifra ya de por sí elevada. Sin embargo, el problema se agudiza y en 2010 la estadística provincial se dispara a más del doble, 840 casos de desahucio. Y lejos de mejorar, en el primer semestre de 2011 las cifras rondan el récord y dibujan una previsión de 1.300 casos a final de este año en la provincia de Almería. Es decir, un 75 por ciento de incremento desde el inicio de las crisis económica.
El dato nacional tampoco escapa a la situación y marca ya un máximo histórico en el segundo trimestre del curso, con un 21,2 por ciento más que en todo 2010 y más de 16.000 lanzamientos judiciales.
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