Mojácar se queda sin procesión el día de fiesta por decisión del cura

La procesión de la Virgen del Rosario de Mojácar, patrona de la localidad, no pudo celebrarse ayer, fiesta local, ya que por decisión del párroco todos los actos litúrgicos se han trasladado al domingo.

La concejal de Cultura, Raquel Belmonte, ha explicado a LA VOZ que fue ella quién se puso en contacto con el sacerdote, al encontrarse de viaje la alcaldesa, para comunicarle que el viernes, día 7, era la festividad de la Virgen del Rosario y que la procesión se debía celebrar el mismo día. Desde el Ayuntamiento, con el objeto de darle mayor realce, se aportaba a la procesión una coral y la banda municipal de música.

Sin embargo, el párroco, Manuel Martínez, es de otra opinión y contestó a la concejal que no se haría el viernes, ya que él buscaba que hubiese mayor afluencia de fieles a los actos, para lo que consideraba el domingo era una fecha más idónea.

Hasta tal punto tenía el sacerdote la decisión tomada, que, según ha comentado Belmonte que en los carteles de la Iglesia Parroquial ya aparecía el domingo como día de celebración de dichos actos.

Ante esta situación, el consistorio ha decidido que el domingo no aportará ni con la coral ni la banda de música para acompañar a la procesión.

Ganar fieles y dar realce
Por su parte, el sacerdote, Manuel Martínez, confirmó a LA VOZ que el objetivo de este traslado al domingo es que el viernes es una fecha bastante próxima al domingo y que ese día podría contarse con más número de fieles dando un realce mayor a la festividad de la patrona. Él argumentaba que en los tres años que lleva haciéndose cargo de la parroquia de Mojácar, la fiesta de la Virgen del Rosario no había contado con tanto personal como en San Agustín, el patrón de Mojácar.

Pero más allá de los aspectos estrictamente religiosos, el sacerdote cree que en esta especie de polémica suscitada hay cuestiones urbanísticas de fondo, ya que justo en la plaza anexa al Templo Parroquial se van a acometer las obras para construir un aparcamiento subterráneo y reformar y embellecer la citada plaza, un proyecto que, según Manuel Martínez, deben contar con el correspondiente visto bueno del Obispado.

Liturgia y urbanismo
Según el propio sacerdote “se están mezclando las churras con las merinas cuando no tiene nada que ver la festividad del Rosario con los problemas urbanísticos que puedan haber surgido”. Martínez asegura que no se opone, “ni mucho menos, a que se construya el parking subterráneo y se acondicione la plaza que da a la Iglesia, pero con unas garantías para un bien de interés cultural como es el Templo Parroquial”.

En su opinión, las cuestiones urbanísticas “deben solucionarse en otros foros que nada tienen que ver con lo estrictamente litúrgico y que es lo que nos atañe en esta ocasión. Es un traslado de los actos de solo dos días y se ha magnificado un problema que a priori no debía tener tanta resonancia”.

Según el consistorio mojaquero, para las obras del parking no haría falta ningún visto bueno del Obispado ya que las obras no afectan a ninguna medianería con el templo y tiene el visto bueno de Cultura al estar declarado Bien de Interés Cultural (BIC).

Por todo ello, se piensa desde el Ayuntamiento que el sacerdote carece de la información necesaria al respecto y espera unos permisos del Obispado que, en este caso en concreto no proceden, por lo que piden que se informe mejor y que ayude a que las fiestas patronales pudiesen celebrarse en el día que de verdad es la festividad de la patrona y que seguramente asistirían los fieles que estuviesen interesados en acompañar a la Virgen.