Los siete tesoros de Cabo de Gata según el diario ‘La Vanguardia’

La belleza extraña y seductora de Cabo de Gata, con su paisaje paradisíaco, lo convierte en un lugar mágico y encantador. Su simplicidad, con esos pueblos casi inexplorados, sus calas, playas y ese origen volcánico lo convierten en uno de esos lugares en los que te puedes perder sin miedo a ser encontrado. Y sus condiciones climáticas únicas, unidas a sus espectaculares vistas, lo convierten en un punto fijado en el mapa como un lugar para visitar. Ahora, ‘La Vanguardia’ ha hecho referencia a él en un artículo titulado ‘El Cabo de Gata en siete localizaciones esenciales’.

Por sus características, el diario catalán recomienda alquilar un coche sin necesidad de lujos y disfrutar de los paisajes, eso sí, sin arrojar basuras, para cuidar el ecosistema. 

San Miguel

Los lugares recomendados son: San Miguel, que pertenece a la capital almeriense, pero se encuentra en el Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar. “No es una villa especialmente bonita pero sí tiene un paseo marítimo muy animado, repleto de restaurantes y bares en los que degustar los productos típicos junto a la playa. Ver el atardecer desde una de sus terrazas es un lujo que sale barato”, escribe la periodista Lidia Bernaus.

Playa de Cabo de Gata

Además, ‘La Vanguardia’ también hace referencia a una de las playas que aparecen en la tercera temporada de ‘La Casa de Papel’, la de Cabo de Gata, de la que dice que es muy ancha y accesible, pero no hay servicios. En cambio se “puede andar a sus anchas e incluso hacer nudismo sin que le molesten y sin molestar a nadie. Lo mejor es que transcurre paralela a la carretera y los arcenes son usados como aparcamiento. Existen accesos a la playa desde la carretera mediante pasarelas de madera”.

San José

Otro clásico almeriense, el municipio de San José, pueblo de pescadores al que cataloga como un enclave precioso pero muy turístico con casas blancas y de baja altura. También hace referencia a las calas de ‘En medio’ y la ‘Higuera’, incluso recomienda restaurantes como el Óctopus, bares cercanos al mar o sitios para alojarse como La Posada de Paco y el hostal Las Gaviotas.

Playas de Mónsul y los Genoveses 

Un escenario muy cinematográfico, las playas de Mónsul y los Genoveses, entran dentro de la recomendación. “Dos de las playas más bonitas: la de los Genoveses, rodeada de pequeñas dunas y de arena fina y dorada, no es muy grande pero sí ancha, hay un sendero por el que se puede subir al impresionante morrón. Más adelante se encuentra la de Mónsul,otra playa virgen de arena fina pero oscura, en la que se pueden ver formaciones rocosas de diseños espectaculares debido a la erosión, como una roca llamada ‘la peineta’, no es muy grande, por eso, en verano, hay restricciones al tráfico”.

Las Negras

En cuanto a lugares para ir comer, Bernaus recomienda Las Negras, un pueblo que tiene alrededor de 300 habitantes y del que destaca su “amabilidad con los visitantes”. También hace referencia al restaurante ‘El Rumbo de Las Negras’ donde sirven pescado fresco del día y en el que recomienda degustar “los sonsos o saltones fritos”.

Isleta del Moro

No podía faltar la Isleta del Moro. “Un pequeño pueblo pesquero situado cerca de Los Escullos, junto a un colosal peñón y una isleta de la que recibe su nombre. La imagen de postal la conforma un gran palmeral a la entrada, casas blancas amontonadas cerca de la playa, barcas varadas en la orilla y pescadores faenando en el agua. Tranquilidad y relax absoluto. Se recomienda probar las tapas del restaurante La Ola”, escribe.

Arrecife de las Sirenas

Para finalizar, es imposible olvidarse del Arrecife de las Sirenas situado en la parte más oriental del sur de España, donde ‘La Vanguardia’ recoge que se pueden ver “antiguas chimeneas volcánicas que sobresalen del agua”. Además hay un sendero en el mirador para llegar al arrecife, al que describe como “una de las zonas preferidas por los buceadores para explorar el fondo marino de la reserva marina”.