Níjar, Tabernas y Sorbas: invernaderos en el suelo y una gran inundación

Invernaderos en el suelo, caminos rurales impracticables y carreteras cortadas. Es la dramática estampa que ha dejado la gota fría en los municipios de Níjar, Tabernas y Sorbas.

En Níjar, aún no se han contabilizado los invernaderos que se han venido abajo con daños tanto en la estructura como en la producción. Los caminos rurales se encuentran impracticables, ya que han salido todas las ramblas, lo que ha impedido el acceso a las fincas por parte de los agricultores.

Por otro lado, hay numerosas calles cortadas con incidencias prácticamente en todas las poblaciones que conforman Níjar, y carreteras cerradas, como la que une San Isidro y El Viso y la Villa de Níjar con Lucainena de las Torres. "Estamos evaluando los daños que son  importantes", asegura a LA VOZ la alcaldesa, Esperanza Pérez.

En Tabernas, la primera tormenta fuerte registrada anoche provocó una fuerte inundación en una de las calles donde fluyen todas las aguas del pueblo. "Empezamos a actuar quitando coches que estaban atrancados, tapando alcantarillas; estuvimos toda la noche de guardia tanto mantenimiento como la Policía Local y yo mismo", explica el alcalde de Tabernas, José Díaz. 

Ya esta mañana, han procedido a la limpieza de barros, fluviales colmados de fango y zonas que parecen lagunas. "En las ramblas donde el agua no fluye estamos reestableciendo los caminos con tierra para los vecinos que viven en el campo puedan salir de sus casas, ya que están incomunicados. Hay un incidencia porque hay una caravana atrancada y necesitamos ayuda de los bomberos para poder sacarla", añade el regidor.

Por último, en Sorbas, han salido varias ramblas, lo que ha afectado a cortes de caminos hacia cortijos y barriadas como Los Perales, a su paso por el río Aguas. "Las incidencias han sido mínimas: también ha habido problemas en la red de abastecimiento de aguas, problemas de suministro eléctrico", afirma el alcalde José Fernández.