Los trabajadores de la central térmica serán “reubicados” tras su cierre

Dentro del clima de incertidumbre que rodea al cierre de la Central Térmica de Carboneras, los trabajadores que realizan en ella su labor respiran hoy algo más tranquilos que en los pasados días, dentro de una justificada preocupación.

El presidente del Comité de Empresa de la central, Antonio Rodríguez (UGT) ha asegurado que en los últimos encuentros mantenidos con responsables de  Endesa, la compañía “nos ha dicho que nos recolocará en otras líneas de negocio llegado el caso” de cierre. En concreto, el trabajo de 148 personas depende de forma directa de la central térmica del Levante.

Sin embargo hay otros cientos de empleos indirectos que, si bien no figuran como parte de la plantilla de la empresa, su continuidad depende en gran medida de la actividad industrial que se realiza en ella, como es el caso de los talleres o diferentes negocios que tienen en esta su principal cliente.

Preocupación
“Mantenemos la preocupación por los compañeros de las empresas auxiliares que están colaborando con nosotros en algunos casos desde que se abrió la central y nos preocupa porque al fin y al cabo somos todos compañeros de trabajo”.

Así se pronunció ayer en la SER el presidente del Comité de Empresa acerca de los alrededor de 200 puestos de empleo indirectos que dependen en mayor o menos medida de la central térmica carbonera. “En la reunión de ayer -por el lunes- lo que le solicitamos a la empresa fue una aclaración y nos clarificaron que en ningún momento se anunciaba el cierre de la central y que no había fecha prevista para ello”, añade Rodríguez antes de reiterar que “le solicitamos la viabilidad del futuro de la plantilla ante todo y se nos ha garantizado que eso sí sucederá, que habrá recolocaciones si llega el supuesto del cierre de la planta” de Carboneras.

Pese a que el cierre de la central carece por el momento de fecha concreta, la producción lleva paralizada en torno a dos meses debido a la falta de competitividad en estos momentos del carbón en el mercado frente a otras fuentes de energía como puede ser el gas. 

Petición al Gobierno
Antes esta situación, los sindicatos UGT-Fica, CCOO de Industria y SIE han rechazado la decisión “unilateral” de Endesa de promover “la discontinuidad en la producción” en la central carbonera y en la de As Pontes (A Coruña) y exigirán al Gobierno “contundencia" con la empresa para el mantenimiento de las dos plantas.

En un comunicado, UGT destaca que la inversión para adecuar ambas instalaciones y que continúen abiertas más allá de 2020 está “prácticamente” realizada, por lo que cree que debería mantenerse “como respaldo para garantizar el suministro peninsular”. De igual modo, los sindicatos requerirán a las diferentes instituciones y a la dirección de la empresa que, en caso de que se adelantara la clausura de las centrales, se presente un proyecto de reindustrialización de las comarcas perjudicadas.

“Una transición energética justa tiene que contar con un plan económico, social, laboral y territorial, que se acuerde en el seno de las mesas de diálogo social y que sea de aplicación antes del propio cierre de las centrales”, entienden desde UGT.

Reunión el jueves con el ministerio
Desde que se conociera el frenazo en la producción de la central y su posible cierre, las reuniones entre las distintas partes implicadas no han dejado de producirse. Este jueves está prevista un nuevo encuentro en el Ministerio de Industria con presencia del Comité de Empresa y de la dirección de la compañía.

Tal y como ha señalado el presidente del comité, Antonio Rodríguez, durante la reunión pedirá “que esta transición no se haga tan rápida y en estas condiciones sino que se pongan otros medios y se haga cualquier tipo de actuación para paliar esto”. Además, Rodríguez adelantó ayer en la Cadena SER que también pedirán “la reindustrialización de la zona como alternativa al posible cierre de nuestra planta de Carboneras” esperando que haya “una solución satisfactoria para todas las partes”.