Al igual que ocurre en el municipio de Almócita, Alsodux, un pequeño pueblo de la Alpujarra almeriense, está trabajando a destajo para poner freno a la despoblación, un problema que están sufriendo en la actualidad muchos otros pueblos de Andalucía. De hecho, hace prácticamente una década que no se produce ningún nacimiento en el municipio.
Uno de los proyectos más ambiciosos que se está llevando a cabo en el pueblo es la construcción de una piscina municipal. Este servicio viene a suplir la demanda de muchos de sus vecinos, ya que durante la temporada estival Alsodux duplica su población. El objetivo no es otro que hacer que los calurosos veranos sean más llevaderos para los vecinos y los visitantes que llegan para disfrutar de las vacaciones. Además de la piscina, Alsodux contará con una zona verde y un parque infantil, todo ello para el uso y disfrute de los propios alsoduxenses y de los pueblos de los alrededores.
El empleo es otro de los pilares básicos contra la despoblación y desde el consistorio luchan cada día para impulsar el trabajo en el municipio. De hecho, gracias a los planes de empleo conforme a la Iniciativa de Cooperación Local, regulada en la Orden de 20 de julio de 2018, se aprobaron las bases reguladoras para la concesión de subvenciones, en régimen de concurrencia no competitiva, de las iniciativas de Cooperación Local, en el marco del Programa de Fomento del Empleo Industrial y Medidas de Inserción Laboral en Andalucía. Esta subvención está cofinanciada por el Fondo Social Europeo con cargo al Programa Operativo FSE Andalucía 2014-2020 o en su caso, al Programa Operativo de Empleo Juvenil según fuentes oficiales.
Otros aspectos como la reciente apertura de un bar, situado en la plaza del pueblo, han supuesto un incentivo para los propios vecinos y visitantes que sobre todo durante los fines de semana degustan comidas típicas de la zona y pasean tranquilamente por el municipio.
Un encanto especial
A pesar de que son muchas las personas que no conocen Alsodux, este pueblo situado en la Alpujarra Almeriense goza de un encanto especial. Y es que, aquellos que lo visiten, pueden descubrir diferentes atracciones turísticas de interés que cuentan con una larga tradición, como la Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de la Asunción, la Érmita de las Ánimas, la Torre del Reloj o los Yacimientos Arqueológicos.
Pero además, el pueblo cuenta con una gastronomía típica que conquista a todo aquel que prueba su cocina y platos populares. Los que visiten el municipio no pueden irse sin degustar platos como el potaje de hinojos, el de trigo pelado o el de acelgas. Además, son muy típicas las migas o la fritada de conejo, así como la tortilla de collejas. El municipio cuenta además con un gran surtido de postres característicos de la zona como los merengues, los soplillos, el pan dormido o el pan de mosto.
Los amantes de la buena gastronomía que deseen disfrutar de un fin de semana diferente, deben saber que merece la pena visitar este municipio, que goza de unas vistas magníficas y un entorno único que invita al descanso y a la tranquilidad.
Naturaleza y calma en estado puro
La Alpujarra almeriense es una zona tranquila que invita a la desconexión. Aunque se trata de una zona que cuenta cada vez con menos habitantes, son muchos los visitantes que se desplazan hasta esta comarca de nuestra provincia para desconectar de la multitud de los núcleos urbanos y respirar ese aire puro que caracteriza a los pueblos de interior, a la España profunda. Montañas, campo, estrellas, calma y una gran variedad de platos tradicionales que invitan a vivir unas vacaciones diferentes. Pero sobre todo, destaca la amabilidad de los vecinos, que siempre muestran alegría al vislumbrar a lo lejos la llegada de nuevos visitantes que quedaran maravillados con los encantos de Alsodux.
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