El proyecto General de Investigación (PGI) actualmente en curso
sobre el yacimiento de Macael Viejo, financiado por ayuntamiento de
este municipio y el PFEA gestionado por Diputación Provincial encara, tras tres años consecutivos de actuaciones arqueológicas,
el final de los trabajos de campo correspondientes a la anualidad
2020-2021.
Los trabajos se han
centrado en uno de los sectores de la necrópolis medieval, donde se
han analizado desde una perspectiva arqueológica y antropológica 18
sepulturas del casi medio centenar hasta ahora excavadas por este
mismo equipo de investigadores, coordinado por el arqueólogo Santiago Moreno Pérez.
Quizás sea este uno de los sectores más
interesantes y más antiguo de lo que fue un extenso cementerio de
casi dos hectáreas ligado a los aproximadamente tres siglos de
funcionamiento de la alquería islámica, tanto desde la perspectiva
de su conservación, que ha facilitado el análisis completo de las
estructuras, como antropológico, pues además de haberse documentado
casos de defunciones violentas, se constata un alto porcentaje de
enterramientos de individuos perinatales e infantiles de muy corta
edad.
Sin embargo, la
mayor parte de la campaña se ha dedicado al aljibe medieval, que ha
quedado excavado íntegramente, quedando a la espera de trabajos de
consolidación del complejo de cara a su futura puesta en valor como
elemento visitable, ya que está completo a falta de la bóveda de
cubrición.
Se trata de una de las edificaciones más destacadas del
asentamiento, que debió requerir una importante movilización de
recursos técnicos, humanos y económicos, y que con una capacidad
estimada en 102/103.000 l es uno de los más grandes de la comarca
del Almanzora, por lo que debió constituir uno de los principales
recursos hídricos del poblado. De hecho, el aljibe es hasta el
momento el contexto medieval más antiguo conocido en el yacimiento
(mediados del s. XIII), por lo que quizás se trate de una dotación
vinculada con los momentos fundacionales de la alquería.
Además de
la documentación del aljibe, que posibilitará realizar un análisis
completo de la estructura, en el espacio donde se edificó se
constata la presencia de contextos prehistóricos, formando parte de
la aldea Neolítica instalada en el cerro, y romanos, pues la gran
cisterna medieval se construyó sobre los restos de un edificio de
grandes dimensiones de esta etapa.
La investigación en curso de este
edificio contribuirá al conocimiento de los pequeños asentamientos
bajo imperiales de montaña, hasta ahora escasamente conocidos y
tradicionalmente eclipsados por el esplendor de las grandes villas coetáneas, pero que constituyen contextos de interés para indagar
las transformaciones del poblamiento y la sociedad en los últimos
momentos de la administración imperial romana en occidente.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/3/provincia/208102/la-segunda-campana-en-macael-viejo-saca-a-la-luz-todo-el-aljibe-medieval