El comercio de Vera y Garrucha toma las calles para exigir soluciones a la Junta

El mismo día en que los bares y las tiendas abren sus puertas en Cuevas del Almanzora, Pulpí o Huércal-Overa, los comerciantes de Vera y Garrucha, dos de los pueblos más eminentemente comerciales del Levante Almeriense, han tomado las calles de sus respectivos municipios para protestar contra la crítica situación que viven tras más de dos semanas con las persianas bajadas debido a las restricciones sanitarias en vigor.

En Garrucha, unas 200 personas se han dado cita en la Plaza Pedro Gea, frente al Ayuntamiento, ondeando pancartas en las que se podían leer mensajes como '¡Basta Ya! ¡Dejadnos trabajar!'. Posteriormente han realizado, manteniendo en todo momento la distancia de seguridad, un recorrido por la Calle Mayor del municipio.

Días antes los pequeños comerciantes y hosteleros garrucheros ya presentaron un escrito ante la Delegación de la Junta de Andalucía en Almería en el que se solicitaba el cese de las restricciones a sus negocios, ya que no consideran "que se pueda demostrar que ningún brote ha surgido" en los mismos.

También piden la emisión de "ayudas directas" efectivas, y la suspensión del pago de las diferentes tasas e impuestos, que según denuncian no se ha producido tras más de dos semanas de parón. Demandas muy similares han esgrimido los manifestantes veratenses, que también han rondado los dos centenares de personas.

En este caso la concentración se ha producido frente al Auditorio Ciudad de Vera a las 12:00 horas, donde los manifestantes han enarbolado una enorme pancarta en la que se podían leer peticiones expresas de ayudas económicas para los autónomos y pymes del municipio: "¡SOS autónomos y pymes! ¡Necesitamos ayudas ya!".

Antes de que la marcha se dispersara, se han leído varios manifiestos, entre ellos uno a cargo del propio alcalde.

En ambos municipios han estado presentes los alcaldes María López Cervantes y Jose Carmelo Jorge Blanco, así como miembros de los equipos de gobierno y de los grupos políticos de la oposición. La unanimidad política en apoyo de las demandas de los comerciantes ha sido total.

Obligados a cerrar una semana más

Tanto Garrucha (1.407 contagios por cada 100.000 habitantes) como Vera (1.541) se quedaron ayer fuera de la reapertura del comercio no esencial decretada por la Junta para otras localidades del Levante y el Valle del Almanzora.

En ambas localidades, los comerciantes y hosteleros ven con desesperación como la incidencia no termina de bajar, a pesar de las duras restricciones que se han visto obligados a adoptar y que están perjudicando seriamente a la economía. Este motivo les lleva a argumentar que los contagios no se están produciendo en el comercio ni en la hostelería, sino en el ámbito privado.