Tíjola albergará la primera zona de autocaravanas de la comarca del Almanzora

La implantación de puntos para autocaravanas en los pueblos del Almanzora es un proyecto que lleva barajando varios meses la agrupación de Izquierda Unida en Tíjola. De forma solidaria, fue compartido con el resto de municipios ante la Mancomunidad con la pretensión, en un primer momento, de convertir los centros de interpretación ubicados en seis pueblos de la comarca en zonas para autocaravanas. Ante la falta de un compromiso formal y común por parte del resto de alcaldes, IU de Tíjola y el regidor tijoleño, Mario Padilla, del Partido Popular, se han puesto manos a la obra para que el proyecto no caiga en saco roto.

Reunión con beneficiarios
En la mañana de ayer la portavoz de IU, Cathy Pinaud, mantuvo una reunión con Padilla, alcalde de la localidad y el vicepresidente de la Federación Nacional de Autocaravanas, Miguel Ríos, para comenzar a trabajar en una zona destinada a este tipo de turismo en el pueblo del Almanzora. “Nos ha dicho que el sitio le gustaba mucho y que tenía todas las necesidades. Incluso nos ha dado los papeles que evitan al Ayuntamiento gastos en proyecto, etc.”, dice Pinaud en referencia a la reunión mantenida con el vicepresidente de la federación.

En cuanto a la ubicación de este complejo, finalmente se ha optado por descartar la reconversión del centro de interpretación construido en la localidad. El proyecto prevé el acondicionamiento de una zona situada en el paraje llamado del Almoroc, “muy bien situado, con un río, un gran restaurante y con espacio donde pueden caber unas 20 o 25 autocaravanas”, detalla la dirigente de Izquierda Unida.
Colaboración entre IU y PP
El visto bueno del Ayuntamiento, gobernado por el PP, ha sido fundamental para que el proyecto siga adelante. Según reconoce Cathy Pinaud, el alcalde popular, Mario Padilla, les comunicó al término de la reunión mantenida el pasado mes de diciembre con el resto de alcaldes, la “posibilidad” de poder “hacer este proyecto aquí”.

A pesar de los pocos días que el Ayuntamiento lleva estudiando el proyecto, los pasos que se han dado en este sentido mediante reuniones y el estudio de viabilidad y la poca complejidad de las obras, hace que la estimación del tiempo que la zona de autocaravanas tijoleña necesita para ser una realidad no vaya más allá del “último trimestre de 2012”. “Hay que obrar para recoger aguas residuales, aunque primero tiene que pasar por toda la burocracia”, indica Pinaud. La misma que, en su día, mostró su proyecto bajo una visión comarcal al resto de compañeros del valle. Ahora, es Tíjola quien golpea primero y, a falta de saber si lo hará dos veces, ella asegura que, al menos, lo harán “con más empeño”.