Las mujeres de Canjáyar vuelven a tejer su árbol de Navidad

El fuego acabó en pocos minutos las pasadas navidades con más de un año y medio de trabajo por parte de las mujeres de la Asociación Nuevos Horizontes de Canjáyar, Durante meses, estuvieron tejiendo las partes de un original árbol de Navidad de croché que se estrenó en 2018 y que, pese al suceso de 2020, vuelve a estar presente en la plaza de la iglesia. Detrás de este nuevo pino tejido en cadeneta, hay muchas horas de laboriosa artesanía, a marchas forzadas, pero finalmente ha llegado a tiempo para que los vecinos y visitantes puedan contemplarlo con orgullo durante estas fechas, como una clara muestra actual del legado artesano de este rincón de la Alpujarra almeriense.

"Nos implicamos mucho en 2018 y desgraciadamente se quemó todo el pasado mes de enero, solo quedó la estructura de hierro, que la hemos tenido que lijar y pintar para volver a usarla. Cuando eso ocurrió, no estábamos con mucha ilusión de volver a hacerlo, teníamos mucha pena por una mujer del pueblo que falleció, pero por ella volvimos a tejerlo", comenta Toñi Urrutia Abad.

En verano, alrededor de 150 mujeres de Canjáyar se pusieron manos a la obra para hacer los 2.400 paños de ganchillo que forman un árbol, de cerca de 10 metros de altura, en el que se han empleado 100 kilos de lana. "Ha sido increíble, creíamos que no nos daría tiempo a terminarlo, que no podríamos hacer las cuatro bases, pero al final nos han sobrado hasta paños, que ahí los tenemos por si se estropean otros", informa la presidenta de Nuevos Horizontes, asociación que fue galardonada hace un mes por La Voz de Almería en los Premios del Andarax.

"No hago otra cosa que coser", repetían las mujeres del pueblo a lo largo de estos últimos meses. Eso sí, con mucha ilusión. "Todo el mundo ha colaborado, también personas que no son de la asociación, mujeres que viven fuera de Canjáyar y el fin de semana nos traían paños hechos. Y hay que estar muy agradecidas al ayuntamiento, que ha facilitado todo el material", asegura Toñi Urrutia.

El árbol de ganchillo es prácticamente igual al que confeccionaron en 2018, aunque los adornos son distintos. Han cambiado los copos de nieve por angelitos que serán iluminados este miércoles, a partir de las 18:00 horas, ante la mirada de los vecinos, que celebrarán con cohetes, villancicos y roscos con chocolate caliente, el comienzo de la Navidad y el regreso de su pino tejido en gancho hecho a mano y, sobre todo, con el corazón de todas y cada una de las mujeres de Canjáyar.