Los almerienses vivirán el cambio de año en manga corta

Muchos almerienses tendrán el privilegio de celebrar el fin de año y los primeros días del nuevo año en manga corta. Así lo establecen las previsiones meteorológicas para los próximos días en los que se esperan temperaturas anormalmente elevadas para esta época del año, es decir en pleno invierno.

La razón de esta situación hay que buscarla en la llegada de una dorsal anticiclónica que trae consigo temperaturas impropias para estas fechas que incluso abren la posibilidad de que se batan algunos de los más viejos récords en la provincia, al igual que en buena parte del área mediterránea española.

Aunque puede parecer que la masa de aire cálido llega desde África, en realidad se trata de aire atlántico que experimentará fuertes ‘descendencias’ que tienden a calentar la masa de aire. De hecho, a unos 1.500 metros de altitud se prevén temperaturas de 10 a 14 grados más altas de lo normal a finales de este mes de diciembre, algo que raramente ocurre por estas latitudes.

Eduardo Romay, del colectivo almeriense de analistas climáticos Cazatormentas, afirma que prácticamente toda la provincia vivirá temperaturas muy altas durante varios días, “de manga corta a mediodía en muchos puntos del interior de Almería, donde se alcanzarán con facilidad los 25 grados, unos registros que son más propios del mes de mayo que de finales de diciembre”.

Curiosamente en esta ocasión serán las zonas costeras los que registren temperaturas menos extremas, debido a que el mar está muy frío, como corresponde a la época del año en que nos encontramos, después del paso de varias olas polares, y ello amortiguará un tanto la subida de los termómetros.

A principios de esta semana, sin embargo, sopló el viento y eso hizo que en varios puntos de la costa almeriense o cercanos a ella se dispararan los registros debido a los vientos ‘terrales’. Como ejemplos El Ejido marcaba 26,1 grados, la tercera máxima nacional más alta de la jornada; en Adra se midieron 23,5 grados; en Garrucha 24,2.

La nueva situación viene precedida por la práctica desaparición del viento, debido a un anticiclón que se va a posar sobre la península estabilizando toda la columna atmosférica. Con este cambio de escenario climatológico en las costas dominarán las brisas y los termómetros se mantendrán en torno a los 20 a 24 grados. En el interior sin embargo se registrarán mayores temperaturas, debido sobre todo a la fuerte insolación, con registros que pueden estar en varios puntos del territorio almeriense por encima de los 25 grados.

Esa situación se prolongará, según Romay, hasta los primeros días del próximo año con una situación atípica: “para hacernos una idea de lo que representan esos más de 25 grados en esta época del año cabe señalar que el récord de temperatura marcado en el aeropuerto de Almería son los 27'7º del día 9 de diciembre de 2010. En este momento no estamos a principios del mes, sino al final, lo que otorga una mayor excepcionalidad al episodio que se vivirá en los próximos días”.

Almería se suma de esta manera a una situación meteorológica que está afectando y aún lo seguirá haciendo al hemisferio norte en estas últimas semanas, un final de año con récords de frío y de calor de forma casi simultánea. Como ejemplo los treinta bajo cero que está viviendo Canadá en fuerte contraste con los 36 del Golfo de México, según señalan los expertos de la red climática Meteored.

Lo más inmediato es la celebración de la Nochevieja, una noche para la que se espera que las temperaturas puedan llegar a ser hasta diez grados más altas de lo normal en varias zonas de la provincia almeriense en las que en otros años el frío y la nieve han llegado a estas presentes en estas fechas.

“El tiempo está loco”

En todo caso para meteorólogos como Roger Solé (eltiempo.com), el tiempo parece haberse vuelto loco en el hemisferio norte con zonas extremadamente frías y otras anormalmente calientes; esos contrastes, como los citados de Canadá y el Golfo de México, se producen “porque la corriente en chorro está extraordinariamente ondulada, de forma que en la parte ascendente de la dorsal se producen temperaturas muy altas, mientras en la parte posterior hay una descarga de aire muy frío”.

En Europa también se están viviendo grandes contrastes; las temperaturas casi veraniegas de España contrastan con el frío extremo de Noruega y puntos de Rusia donde están llegando a los diez bajo cero. La causa de esa suavidad de temperaturas es el vórtice polar reforzado en el Polo Norte.