El gran proyecto turístico que unirá Almería y Granada por las Alpujarras

El pasado viernes tuvo lugar en la localidad granadina de Órgiva una reunión de gran importancia para el futuro del sector turístico en el Valle de Lecrín (Granada) y en las Alpujarras (Granada y Almería). Ante un total de 25 municipios de ambas provincias, se presentó un atractivo proyecto que pretende ser, si todo sigue según lo previsto, un referente a la altura de la Ruta de la Plata y, por qué no, también del Camino de Santiago.

Se trata de la Ruta de Boabdil, un trayecto que representa el camino hacia el exilio que emprendió en febrero de 1492 el último sultán del reino nazarí de Granada, apodado como 'el Rey Chico', que fue desterrado a Codba (actual Fuente Victoria) y pasó junto a su familia y su séquito por el Señorío de Laujar, donde falleció su esposa Morayma, y después, en octubre de 1493, partió en un barco desde Adra hacia el Sultanato de Fez.

La idea de poner en valor ese histórico recorrido nace desde el Consistorio orgiveño, que recibió la semana pasada a los representantes políticos de las más de una veintena de pueblos por los que pasaría esta ruta, contemplando por el momento a los almerienses de Alcolea, Laujar de Andarax, Fondón, Berja y Adra, que deberán decidir si unirse a este proyecto que acaba de nacer y al que le quedan por pasar aún numerosos trámites.

Trámites

Para poder ponerlo en marcha, primero las localidades invitadas deben firmar un convenio y crear una asociación desde la que poder presentar dicho proyecto a la administración, ya que sería subvencionado por los fondos europeos 'Next Generation', dentro de su partida del Plan de Sostenibilidad Turística en Destino.

En principio, la Ruta de Boabdil que hay prevista cumple dos de los requisitos más importantes para recibir dicha financiación. Por un lado, habrá una clara cohesión entre territorios para poder darle forma a este gran proyecto turístico, ya que están implicadas dos provincias, tres comarcas y, si todos los invitados aceptan formar parte del mismo, un mínimo de 25 municipios. Por otro, se trata de una ruta no motorizada, que puede hacerse en sendero caminando, en bicicleta e incluso a caballo, respetando siempre el medio ambiente.

Por ahora es un proyecto recién nacido, que acaba de dar sus primeros pasos, pero nace con la idea de forjarse como una apuesta de futuro para las Alpujarras y sus habitantes. Debe presentarse durante el mes de abril, una vez creada la asociación, y la resolución podría conocerse antes de este próximo verano, aunque según afirman desde Órgiva, su puesta en marcha "necesitaría un mínimo de dos años, para adecentar y señalizar la ruta".

Se ha respetado, como base de este proyecto, la historia del destierro de Boabdil y por los lugares que pasó, aunque esta iniciativa está pensada para, en un futuro, tener varias vertientes y que se ramifique por otras localidades alpujarreñas tanto granadinas como almerienses.