Celos que matan en Níjar: cuando tirotearon a un joven durante una cita

Un joven identificado con las iniciales J, A. falleció en la madrugada del domingo al lunes 22 de marzo de 2010 al recibir dos disparos de escopeta en el paraje conocido como Camino El Acebuchal, en la barriada nijareña de San Isidro. Los hechos ocurrieron en torno a la una y media de la mañana. El joven trabajaba con su padre en un invernadero de la familia e iba a cumplir 26 años.

Los padres del fallecido supieron de lo ocurrido a primera hora de la mañana del lunes 22 cuando la Guardia Civil se presentó en su casa, en la calle Toledo de la barriada de San Isidro. Fuentes de la investigación informaron de que el joven fue tiroteado, posiblemente con una escopeta de caza, y uno de los tiros le desgarró gran parte del cuello del fallecido.

Una llamada anónima alertó a los efectivos de seguridad de que en este tramo de la carretera y junto a una furgoneta se encontraba un hombre desvanecido en el suelo en medio de un gran charco de sangre. Unos vecinos de la zona escucharan varios disparos. Las pruebas en el camino de asfalto eran evidentes y la sangre llegó a manchar casi cuatro metros de la calzada.

Los vecinos aseguraron que el fallecido "era un chico normal y de buena familia. Al parecer el joven recibió una llamada sobre las 00:00 horas, y una vez que estaba acostado se levantó y salió de la casa.

Ajuste de cuentas

La Policía Judicial de la Guardia Civil que barajó la hipótesis de un ajuste de cuentas como el origen del crimen detuvo doce horas más tarde al presunto autor, que fue identificado como A. M. de 29 años de edad, vecino de Nijar. El 24 de marzo, la Policía Judicial detuvo a J.J. de 33 años y M. C de 34, ambos vecinos de Níjar, por su implicación directa en el asesinato. Tras la detención del supuesto autor material y la recuperación del arma utilizada en el crimen, la Guardia Civil centró las indagaciones en determinar el móvil y concretar la autoría de los hechos investigados, orientando las pesquisas al entorno próximo y afectivo de la víctima.

Las averiguaciones realizadas al entorno a la investigación, permitió en pocas horas detener al autor material del asesinato y la intervención de la escopeta utilizada, durante la realización del registro del domicilio del detenido. Las investigaciones practicadas por la Guardia Civil señalan que esa noche, la víctima había concretado una cita con M. C con la que al parecer mantenía una relación sentimental, al lugar donde se produjo el crimen y donde le esperaban los tres detenidos. Durante el registro del domicilio de los últimos detenidos, realizado por la Guardia Civil, los investigadores obtuvieron numerosas pruebas incriminatorias en la consecución de los hechos. La moda de los crímenes por encargo ha vuelto a la provincia de Almería después de un lustro desde que se registrara el último asesinato de este tipo. El móvil del asesinato fueron los celos que el autor material del mismo sentía hacia la víctima, de quien sospechaba que le engañaba con su pareja, también detenida. 

El Juzgado de Instrucción número 2 de Almería decretaba el ingreso en prisión preventiva de J.J y A.M como presuntos autores del crimen; el último en calidad de autor material; los dos primeros como inductores del mismo. La investigación, ha sido una de las más minuciosas y rigurosas que se recuerda. De su estudio se han derivado la implicación de los dos últimos detenidos, al igual que las declaraciones recogidas a numerosas personas que tenían alguna relación con la víctima, por lo que se apuntó a motivos pasionales.

Se constató que la mujer de 34 años, con quien al parecer mantenía una relación sentimental el fallecido había concertado una cita la noche en que se produjo su muerte, una cita que terminaría con su vida. Cuando el joven llegó al lugar, ella le esperaba junto a su compañero sentimental J. J. y un tercero A.M. quien, al parecer, efectuó los disparos mortales por encargo de la pareja.