Las Tres Villas abre su residencia con un enfermo de cáncer sin recursos

José García, un enfermo de cáncer que se encontraba en un hospital almeriense desde hace tres meses porque no dispone de suficientes medios económicos para pagar un geriátrico, ni con familiares que lo cuidaran, ingresará a las 12,00 horas del mediodía de este miércoles en la nueva Residencia Las Tres Villas, que abrirá sus puertas por primera vez para atenderle, junto a un reducido grupo de mayores. 

José podrá ingresar en la flamante residencia gracias a que el Ayuntamiento de Las Tres Villas ha reservado en el pliego de condiciones del centro, adjudicado a una sociedad cooperativa andaluza, un puñado de plazas destinadas a personas sin recursos. Pero también después de que la alcaldesa del municipio, Virtudes Pérez, conociese su historia a través de La Voz, que llegó a conmoverla. 

Y es que, como informó este diario, este policía nacional jubilado de 87 años se lamentaba de que no tenía a nadie en la vida que pudiera hacerse cargo de él, puesto que ha perdido todo contacto con sus hijos y su exmujer, y además debía pagar a ésta buena parte de su pensión, con lo que tampoco le quedaba suficiente dinero para poder pagarse una residencia.

A todo ello se unía, como reconocía, que los médicos le habían informado de que su cáncer era terminal. “Solo quiero conocer  a mis nietos, que no sé ni cuantos tengo, y despedirme de mi familia”, decía. 

Sin embargo, esto no será posible porque a fecha de hoy, un mes después de la publicación, ni sus hijos ni su ex se han puesto en contacto con él. Aún así, José contaba ayer ya las horas para su traslado este miércoles a la residencia.

A buen puerto Finalmente, las gestiones de la alcaldesa han dado sus frutos y José podrá ser uno de los 'afortunados' mayores que estrenen este miércoles la Residencia Las Tres Villas, que por fin echará a andar después de no pocos problemas, entre ellos los provocados por la pandemia. Y es que, como explica Virtudes Pérez, el Ayuntamiento comenzó a gestar el proyecto hace más de una década.

“En 2011 recibimos el primer informe de viabilidad”, recuerda la alcaldesa, para quien, por tanto, la apertura del centro es un hito en la historia del pueblo, puesto que va a ayudar a mejorar la calidad de vida, tanto de los usuarios como de las personas que van a trabajar en él, que cuando esté a pleno rendimiento serán alrededor de 50, muchas de ellas del pueblo o de la comarca. “Estoy que todavía no me lo creo”, decía Pérez este martes. 

La moderna y atractiva residencia se encuentra en Ocaña, contará con 4.000 metros cuadrados y estará dotada de una zona exterior urbanizada de 2.750 metros cuadrados. Según su gerente, Patrocinio Wals, el centro contará con 84 plazas, de las que más de una treintena son concertadas con la Junta de Andalucía. Dispondrá tanto de plazas de larga estancia como temporales, para periodos limitados de tiempo, tanto para recuperación física como funcional. 

La gerente destaca las magníficas instalaciones construidas por el Ayuntamiento, “que no ha escatimado en recursos”, de forma que ha sido dotada con las últimas tecnologías, como placas solares o sistemas lumínicos inteligentes. También cuenta con “unas instalaciones de cocina magníficas, y unas estancias muy luminosas, amplias y cálidas en las que se han cuidado al máximo los detalles". 

Entre el medio centenar de trabajadores con que contará habrá de muy variadas categorías, desde médicos, enfermeras, psicólogos, fisioterapeutas y trabajadores sociales, además del personal de limpieza, cocina, y administrativo.

Sin embargo, la gerente destaca por encima de todo que la “seña de identidad”,  de su empresa, tras más de 25 años de experiencia en el sector, es la calidad tanto  de su unidad de rehabilitación física y funcional como la de neurorrehabilitación para personas que hayan padecido ictus o casos de deterioro cognitivo como el alzheimer. 

Hasta el mínimo detalle

Tanto la empresa como el Ayuntamiento han cuidado hasta el último detalle para abrir el centro este miércoles, aunque la ceremonia oficial de apertura será en unos días. 

El Consistorio ha cuidado incluso  el nombre de la calle donde se encuentra, que ha dedicado a Isabel Reyes Ramos, una vecina que ha donado dos depósitos de agua  al pueblo.