Han pasado cuatro días desde el incendio forestal en la Sierra de Gádor, donde el fuego calcinó 67 hectáreas de matorral, encinar y pinar, dejando imágenes desoladoras de una zona, perteneciente al término municipal de Dalías, que está considerada como el pulmón del Poniente almeriense.
Cabe recordar que se originó antes del mediodía del lunes y que requirió la intervención de más de un centenar de efectivos del INFOCA, que decretaron su control pasadas las 1:30 de la madrugada. Los medios de extinción trabajaron sin descanso para hacer frente a las llamas en el paraje conocido como Cortijo de la Cruz, cuyos propietarios, la familia Espinosa, han querido hacer público su agradecimiento a cada una de las personas del INFOCA que "evitaron un desastre medioambiental".
Personal del Servicio Operativo de Extinción de Incendios Forestales de Andalucía de Almería, Granada y Málaga trabajaron en el lugar, donde a lo largo de dicha tarde se dieron rachas de viento de 20 a 25 kilómetros por hora que complicaron la situación notablemente.
Por otro lado, la familia propietaria de los terrenos denuncia "la falta de vigilancia y cuidado de la Sierra de Gádor, a pesar de ser el pulmón del Poniente almeriense" y consideran que eso "ha facilitado que se pueda cometer el incendio de forma intencionada".
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