Fernández-Pacheco visita el Salar de los Canos y conoce sus 200 especies

El consejero de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul, Ramón Fernández-Pacheco, realizó este sábado, 25 de marzo una visita institucional al Ayuntamiento de Vera, donde ha mantenido una reunión de trabajo con su alcalde, Alfonso García, y parte del equipo de Gobierno, para abordar algunos de los temas que son vitales para el futuro de este municipio.

Durante su visita al municipio, el consejero ha conocido el humedal de la costa veratense, un enclave que forma parte del Inventario de Humedales de Andalucía desde el año 2021 por su valor ecológico. Lo ha hecho junto al alcalde y también con los representantes de la Asociación Salvemos el Salar de los Canos, quienes han agradecido el interés del consejero en visitar este espacio.

El humedal de la costa veratense, el Salar de los Canos, alberga nada más y nada menos que más de 200 especies de aves durante las cuatro estaciones del año. Alrededor de 14 o 15 especímenes se encuentran en el catálogo de especies amenazadas en la Comunidad Autónoma de Andalucía.

Muchas de las especies amenazadas tienen una, gran comunidad reproductora en el Salar de los Canos, como puede ser la Malvasía Cabeciblanca. La Malvasía Cabeciblanca no es un ave migratoria, y podemos disfrutar de su presencia durante todo el año. Sin embargo, el humedal veratense es lugar de estacionamiento de paso de gran cantidad de aves que vienen del continente africano y de toda Europa.

Previo a la visita al humedal, el consejero, acompañado por el delegado territorial en Almería, Manuel de la Torre, firmó en el Libro de Honor del Ayuntamiento destacando el compromiso de la Junta de Andalucía para colaborar y trabajar de la mano de Vera en beneficio de todos los ciudadanos. Por su parte, el alcalde veratense, mostró su satisfacción por recibir en el municipio a un consejero del Gobierno andaluz, presidido por Juanma Moreno, “que está cumpliendo con Vera y sus vecinos”. El edil realizó además la entrega de un artículo que es seña e identidad del municipio, un jarro de cerámica de cinco picos.