Se trata de uno de los proyectos que más expectación han levantado en los últimos años en el municipio de Garrucha. Y no sólo eso, sino que van a afectar a un Paseo Marítimo que forma parte de la vida de miles de almerienses. Algunos, por ser vecinos y transitarlo por regularidad y, en el caso de otros, por recordarlo con el cariño con el que se recuerdan los paseos veraniegos en lugares de veraneo.
Y es que el Paseo Marítimo de Garrucha, conocido también como el Malecón sobre todo por sus vecinos, afronta ya sus obras de ampliación después de que la Dirección General de la Costa y el Mar del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico haya dado este viernes el pistoletazo de salida a los trabajos de rehabilitación del borde marítimo, en el tramo que discurre entre el castillo de Jesús Nazareno y el límite con el término municipal de Mojácar.
Los trabajos, que cuentan con un presupuesto de 1,7 millones de euros y un plazo de ejecución de 11 meses, fueron adjudicados el pasado 15 de marzo a la empresa Licuas S.A. Se trata del único tramo costero en Garrucha que no cuenta con paseo marítimo. Las obras se financiarán íntegramente con cargo al Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno de España, que vehicula los fondos Next Generation EU.
El subdelegado del Gobierno, José María Martín, ha visitado hoy la zona y ha mostrado su “satisfacción” por el arranque de unas obras “muy demandadas” en el municipio, que estarán listas en menos de un año. Martín Fernández ha estado acompañado por la alcaldesa de Garrucha, María López y por el jefe provincial de Costas, Enrique López.
El proyecto creará una zona lúdica, contigua al mar, de uso público, que por sus dimensiones y características, 430 metros de largo y 50 metros de ancho, frente al castillo y en una zona no densa en edificación, no sugieren un uso lineal como el del paseo marítimo contiguo, sino que está llamada a ser, probablemente, el espacio libre de uso público más importante del municipio.
Además, incluye un paseo peatonal contiguo a la línea de deslinde, otro paralelo al anterior que linde con la futura vía rodada, varias conexiones y paseos peatonales que enlacen los dos paseos anteriores, una zona de estancia, con bancos, cara al mar y desde la que se accederá a la playa a través de una escalera y una rampa peatonal y una glorieta en la zona sur que permitirá cambiar de sentido y facilitar la entrada a la gasolinera existente en el lugar.
Igualmente, las obras dejarán una zona pavimentada alrededor del castillo, con vegetación; una fuente en explanada con chorros de agua (que no será solo ornamental, sino también pisable), una amplia zona de juegos sobre pavimento de arena, un parque municipal, un lugar para chiringuito, una zona libre para la instalación de carpas para exposiciones o muestras, un aparcamiento con palmeras y una glorieta sobre la actual carretera AL-5105, con la que permitir cambios de sentido y mejorar el acceso a la gasolinera.
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