El incesante y merecido éxito de una Escuela almeriense referente en Andalucía

La Escuela de Música de Roquetas abrió sus puertas en 1999 ofreciendo disciplinas básicas, clases de guitarra, piano y lenguaje musical. Siguen siendo de las más demandadas a pesar de que este centro, que añadió posteriormente a su primer nombre el de Danza y Teatro, cuenta en la actualidad con un amplia oferta, con una veintena de instrumentos distintos, con incorporaciones recientes como música moderna, bajo eléctrico o cajón flamenco. Un crecimiento que ha ido de la mano del también sorprendente aumento de solicitudes de nuevo acceso cada curso, rozando para el que viene las 1.200. Todo un récord.   

"Nos encantaría asumir a todo el mundo, pero el espacio físico evidentemente es limitado", afirma Belinda Sánchez-Capuchino Cruz, directora de este centro de régimen especial que se ha convertido en todo un referente en Andalucía, en el que cada año se genera una larga lista de espera que se va consumiendo a cuentagotas. El número de plazas es alta, pero la demanda para acceder a la Escuela de Música, Danza y Teatro lo es todavía más, con solicitantes que incluso esperan hasta un par de cursos para poder ser alumnos. 

Ubicada en El Parador, esta escuela que cuenta con un total de 26 aulas, 8 cabinas de estudio, un salón de actos para más de 150 personas, un teatro auditorio con 366 butacas de aforo y otros espacios como despacho, sala de profesores, biblioteca o almacén, ha tenido durante este pasado curso 2022-2023 un total de 702 alumnos matriculados, 582 en Música y Danza y 120 en Teatro. Para el de 2023-2024 las solicitudes de nuevo ingreso se reparten en 995 en Música y Danza y 181 para Teatro, según los últimos datos facilitados por el propio centro, desde el que especifican que esa cifra total de 1.176 solicitudes para el año que viene corresponderían a unos 750 solicitantes aproximadamente, ya que muchas personas hacen petición para varias disciplinas.

Apuesta por la cultura y las enseñanzas artísticas

El 'boom' de solicitudes de acceso para este centro no es fruto de la casualidad. No es una moda. "No hay un único motivo que determine el éxito, está el equipo humano comprometido (27 profesores, conserje y administración), vocacionales, nos encanta nuestro trabajo y trasmitir el conocimiento. El alumnado recibe esas ganas e ilusión", asegura la directora, que también destaca como clave "la visibilidad o apuesta que desde la administración local se hace por una educación, por la cultura y los buenos servicios que ofrece".

Destaca Sánchez-Capuchino el acierto del Ayuntamiento de Roquetas de Mar a la hora de hacer programaciones culturales municipales "para todos los gustos, con conciertos de rock, música antigua, teatro infantil... La diversidad a la hora de programar es muy inteligente". Considera que "esto hace que cada vez el interés por las disciplinas artísticas sea mayor entre la población roquetera". A ello se une que, a diferencia de un conservatorio, no hay un límite de edad para ser alumno de la Escuela de Música, Danza y Teatro de Roquetas, cuyo único requisito es estar empadronado en el municipio roquetero, aunque si se cubre el cupo "se abre a habitantes de pueblos vecinos como Vícar o La Mojonera". 

Las disciplinas más demandadas

De las más de un millar de solicitudes para ingresar el próximo curso en la Escuela de Música, Danza y Teatro, destaca en el desglose por especialidades musicales que piano es la más demandada con 163, seguida de guitarra con 123. Las siguientes con mayor número de solicitantes serían guitarra eléctrica (60), violín (53), guitarra flamenca (45) o percusión (44). En cuanto a danza, los talleres para adultos, que en el 2022-2023 tuvo 18 matriculados, se reflejan 56 aspirantes a nuevo ingreso para el curso próximo.

Música y movimiento (245, divididos en cuatro cursos distintos por edades), cajón flamenco (17), bajo eléctrico (25), clarinete (15), flauta travesera (25), saxofón (21), trombón (3), bombardino (4), violonchelo (11), contrabajo (-), musicoterapia (19), predanza (29), danza (19) y teatro (181), completan el listado de solicitudes. 

Los duros años de pandemia

La pandemia de COVID-19, época en la que Belinda Sánchez-Capuchino Cruz se hizo cargo de la dirección de la Escuela de Música de Roquetas de Mar, fue una de las etapas más duras para este centro que mostraba un crecimiento constante años tras año desde su fundación. El compromiso de su profesorado marcó la diferencia en esta época de incertidumbre. "Tuvimos que hacer un ejercicio de pedagogía, adaptamos el centro (cerrado de marzo a junio por decreto). Conseguimos mantener al alumnado en lo peor de la pandemia", recuerda. 

Como otros muchos centros, se dieron clases de manera on-line y la llama artística que se encendía cada día en las aulas de la Escuela jamás se apagó, pese a la distancia física, a las restricciones y todas las dudas que generó esta situación en una sociedad que jamás había vivido algo parecido. Pero la música siguió sonando, las inquietudes artísticas de pequeños, jóvenes y mayores se mantuvieron a flote y una vez pasado el temporal, este centro roquetero volvió a abrir sus puertas y sigue consolidándose como una apuesta segura, como una casa cimentada en arte en la que cada vez más roqueteros quieren vivir.