La brisa marina hace más llevadera en Almería la nueva ola de calor

Y el calor llegó este lunes, como se había pronosticado, pero Almería guarda un tesoro y este se llama ‘brisas marinas’ que ayer lograron frenar la amenaza de temperaturas cercanas a los 45 grados, un ‘regalo’ en una España que se cuece bajos los inmisericordes rayos del sol.

Tampoco se puede decir que el de ayer fuera un día ‘fresquito’, sobre todo si se miran las máximas que se alcanzaron en varias comarcas del interior provincial, con alrededor de 42 grados en el Campo de Tabernas o en el Valle del Río Nacimiento, y por encima de los cuarenta en los campos de Níjar, en la parte interior del Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar, en las faldas de la Sierra de Los Filabres y en varios municipios del Valle del Andarax. Incluso en el aeropuerto, tan cerca de la capital, se alcanzaron esos cuarenta grados en las horas centrales de la jornada.

Régimen de brisas
Las brisas procedentes del mar fueron clementes con las dos áreas del litoral, tanto a Poniente, entre Adra y la capital, como a Levante, donde se movieron entre los 35 y los 29-30 grados. La mejor muestra de ese efecto beneficioso de las brisas marinas se explicita en el entorno de Almería, que vivió la jornada en el entorno de los 35 o 36 grados mientras que unos pocos kilómetros más hacia el interior, en localidades como Benahadux o Pechina, estuvieron en el entorno de los 40 grados, según ha explicado Eduardo Romay, del colectivo almeriense de analistas climáticos Cazatormentas.

Temperaturas altas sin duda, pero no hasta el extremo de ser consideradas máximas históricas, pese a que la sensación, en algunos momentos del día, fue de mucho calor. En cierto modo un fenómeno achacable a la escasa cobertura vegetal existente en zonas como la capital, porque sus 35 o 36 grados se convierten en 44 o 45 al sol y hasta diez grados más en el interior de los vehículos que no tienen aire acondicionado.

La parte más baja de los grandes valles se ha mantenido con temperaturas de no más de 35 grados debido, principalmente, a la entrada del viento de levante, que ha soplado más de lo previsto, procedente de la costa y que arrastró las brisas hacia las áreas de interior.

Pero en cualquier caso las alertas siguen activas y para la jornada del martes se espera que el calor se intensifique en todo el Valle del Almanzora, con puntos de más de 45 grados. Una previsión que se mantiene e incluso se agudiza de cara a la jornada del miércoles, cuando aparecerá una fuerte ‘ponientada’ que llevará aún más calor a toda la provincia, salvo quizá en el área de la capital, de nuevo defendida por las brisas.

A comprar
El simple anuncio de una ola de calor tiene un efecto inmediato sobre las ventas de aparatos de aire acondicionado. De hecho este último fin de semana se han disparado esas ventas en establecimientos como Media Mark, Leroy Merlín, Obramat y otros establecimientos.

También se ha producido una movilización para tratar de hacer llegar a los ciudadanos los consejos para protegerse del calor extremo, tanto por parte de Cruz Roja, Protección Civil o autoridades sanitarias: ventilar las casas por la noche, cerrar ventanas y usar cortinas contra el sol o hidratarse son algunos de ellos.