Elizabeth de la Cruz
21:01 • 21 abr. 2012
Según fuentes de Infancia del Obispado de Almería desde la pasada semana y hasta el mes de junio más de 3.000 niños de la provincia recibirán la Primera Comunión. Un día que ellos esperan con ilusión pero que en estos difíciles tiempos a sus padres a menudo se les complica, debido al desembolso extra que acarrea a sus bolsillos los preparativos de este acto religioso.
“Antes una comunión podía superar las 80 personas y ahora ha bajado hasta los 30 ó 40 invitados”, aclara Toñi Fernández, desde el Hotel Restaurante El Edén de El Ejido. “El precio del cubierto ha descendido en un 25%”, apostilla el director de Ejido Hotel, Pedro Cano, quien además lo tiene claro, “han vuelto a celebrar las comuniones en casa, en el local de un amigo o de una forma más íntima”.
Desde el complejo Puerta Europa en Níjar, José Mañas señala, “ahora te puedes encontrar comuniones de 30, 20 ó incluso 15 personas. Los padres, hermanos y sanseacabó”. La misma tónica se observa en el Levante almeriense, donde Antonio Pérez, del Restaurante La Artesa, añade, “el año pasado el precio del cubierto bajó hasta los 40 euros pero este año es que no quieren llegar ni a los 30”. Al igual que ocurre en el Almanzora, ya que según subraya el propietario del Hotel Restaurante La Parrilla de Albox, Gregorio Martínez, “la media estaba en 60 euros y ahora no sube de los 40”.
Y todo sin contar el coste del traje o vestido y los zapatos, que en el caso de los niños no llega a los 400 euros, pero que en el de las niñas se sitúa en torno a los 700. Si a ello se le suman los 300 euros de media del reportaje fotográfico y unos 30 euros en peluquería, el coste medio general iguala al número de niños que harán la comunión.
En las pastelerías hay más encargos
Toda moneda tiene una cara y una cruz, y la de esta situación tiene un sabor muy dulce. Según la propietaria de la Pastelería Capricho de El Ejido, Mariló Romero, “nos encargan más pasteles y tartas porque al celebrarlo en casa, en el local o cochera de un amigo, no hay un tiempo límite como en un restaurante, sino que se está más tiempo, y a última hora siempre vuelven a apetecer los dulces”.
“Antes una comunión podía superar las 80 personas y ahora ha bajado hasta los 30 ó 40 invitados”, aclara Toñi Fernández, desde el Hotel Restaurante El Edén de El Ejido. “El precio del cubierto ha descendido en un 25%”, apostilla el director de Ejido Hotel, Pedro Cano, quien además lo tiene claro, “han vuelto a celebrar las comuniones en casa, en el local de un amigo o de una forma más íntima”.
Desde el complejo Puerta Europa en Níjar, José Mañas señala, “ahora te puedes encontrar comuniones de 30, 20 ó incluso 15 personas. Los padres, hermanos y sanseacabó”. La misma tónica se observa en el Levante almeriense, donde Antonio Pérez, del Restaurante La Artesa, añade, “el año pasado el precio del cubierto bajó hasta los 40 euros pero este año es que no quieren llegar ni a los 30”. Al igual que ocurre en el Almanzora, ya que según subraya el propietario del Hotel Restaurante La Parrilla de Albox, Gregorio Martínez, “la media estaba en 60 euros y ahora no sube de los 40”.
Y todo sin contar el coste del traje o vestido y los zapatos, que en el caso de los niños no llega a los 400 euros, pero que en el de las niñas se sitúa en torno a los 700. Si a ello se le suman los 300 euros de media del reportaje fotográfico y unos 30 euros en peluquería, el coste medio general iguala al número de niños que harán la comunión.
En las pastelerías hay más encargos
Toda moneda tiene una cara y una cruz, y la de esta situación tiene un sabor muy dulce. Según la propietaria de la Pastelería Capricho de El Ejido, Mariló Romero, “nos encargan más pasteles y tartas porque al celebrarlo en casa, en el local o cochera de un amigo, no hay un tiempo límite como en un restaurante, sino que se está más tiempo, y a última hora siempre vuelven a apetecer los dulces”.
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