La berrea en Almería: cuándo es y dónde disfrutar de este espectáculo natural

Con la llegada del mes de septiembre, coincidiendo con la bajada de la temperatura ambiente y la presencia de las primeras lluvias, comienzan a oírse los primeros berridos del ciervo.

En Almería se puede disfrutar de este espectáculo de la naturaleza en la Sierra de Los Filabres, donde se estima que la población de ciervos, tras unos años complicados de sequía y alguna enfermedad, fluctúa entre los 1.500-2.000 ejemplares, teniendo en cuenta todas las clases de edades y ambos sexos, según datos facilitados por la Junta de Andalucía.

Cualquier zona de la Sierra de Los Filabres, en principio, es idónea para disfrutar de la berrea siempre que sea el momento de celo adecuado. No obstante, zonas como El Toril, La Merendera, Calar Alto, El Cortijo del Conde, Arroyo Berruga... suelen ser áreas muy activas en este mes de septiembre, destacan desde el Gobierno regional.

La época central de la berrea suele coincidir entre el 15 de septiembre y el 25 de ese mismo mes, aunque hay que tener en cuenta que esto suele variar bastante dependiendo del año climatológico. 

Desde la Consejería de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul aclaran que el periodo de la berrea comienza cada año en fechas diferentes, dependiendo de la climatología. "Eso sí, coincide año tras año con los primeros días de septiembre y se extiende hasta principios de octubre. En cada zona varía. Por ejemplo, en la solana de la sierra es diferente a la umbría, y luego depende también de la disponibilidad de comida de cada sitio para que las ciervas ovulen", explican las citadas fuentes.

En septiembre, coincidiendo con la berrea, los guardas de caza de la Consejería de Medio Ambiente, además del control de cazadores furtivos y realizar censos sobre la población del ciervo, también actúan como guías de caza en los recechos de ciervo. 

En qué consiste la berrea

La clave está en las ciervas, que ante las primeras lluvias del mes de septiembre y la posibilidad de que broten pastos frescos tras el seco verano, comienzan a ovular y entrar en celo. Este hecho hace que los ciervos macho perciban las feromonas que desprenden las hembras y comiencen a querer controlar un terreno determinado en las que las ciervas se encuentran.

"Es por esto que comienzan las luchas por el territorio entre los machos mas dominantes, produciéndose una selección natural que hará que el ciervo más preparado será el que transmita sus genes a la próxima generación. La berrea es la expresión de la defensa de esos territorios y advierte a los demás que quieran invadirla", explica la Junta. 

En esta época, los machos de ciervo están sometidos a un estrés considerable. Pierden muchos kilos de peso, debido a que a veces no tienen casi tiempo ni de comer al estar defendiendo su parcela. Algunos, incluso, pierden la vida por el agotamiento, las heridas de las peleas y otros factores.