Los pueblos de Almería tienen ya fijadas sus fiestas locales

Los almerienses, como el resto de españoles, disfrutarán este año de 14 días festivos, repartidos entre los  diez de carácter nacional, los dos que determina la Comunidad Autónoma andaluza y otros dos cuya determinación corresponde a los municipios.

Un calendario festivo que se ha dado a conocer a principios de este año y que los pueblos de la provincia ya han hecho público para que sus habitantes sepan en qué fechas caen cada uno de ellos, la mayoría coincidiendo con la festividad del patrón o la patrona, pero otros por acontecimientos o condicionantes sociales.

No recuperables

Esos catorce días festivos tienen en cualquier caso la consideración de ‘festivos no recuperables’, remunerados y de carácter obligatorio. De los doce festivos que determinan el estado o la comunidad autónoma ocho de ellos son obligatorios y no sustituibles por las autonomías.

Son el Día de año Nuevo (1 de enero), el Viernes Santo (este año el 29 de marzo), el Día del Trabajo (1 de mayo). el Día de la Asunción (15 de agosto), la Fiesta Nacional del 12 de octubre, el Día de Todos los Santos (1 de noviembre), el día de la Constitución (6 de diciembre) y el Día de Navidad (25 de diciembre).

Andalucía

En Almería hay que sumar a esos ocho otros cuatro ‘elegibles’ que para el presente año de 2024 son el Día de Reyes (6 de enero), el Día de Andalucía (28 de febrero), el Jueves Santo (28 de marzo) y el Día de la Inmaculada (8 de diciembre).

Con ese calendario este año se podrán disfrutar de cuatro fines de semana largos, es decir aquellos en los que los festivos coinciden o bien en viernes o bien en lunes. Son el del 1 de enero (ha caído en lunes), el 29 de marzo (Viernes Santo, al que se uniría el Jueves Santo), el 1 de noviembre (viernes) y el 8 de diciembre, Día de la Inmaculada (domingo que presumiblemente se trasladará al lunes 9). 

Pueblo a pueblo

En la tabla que acompaña a esta información se pueden encontrar las fiestas de carácter estrictamente local que se celebrarán a lo largo de todo el año en la provincia de Almería, por elección de las corporaciones municipales, que atienden a las tradiciones, al santoral y a otras motivaciones relacionadas con su población.

Llama la atención el hecho de que si bien los distintos pueblos de la provincia mantienen vivas sus fiestas patronales, que se reparten a lo largo de todos los meses del año, muchos de ellos disponen de una segunda jornada festiva en los meses de verano. De hecho de los más de doscientos festivos que celebran los municipios almeriense algo más de ochenta tienen lugar en los meses de verano, es decir entre los de julio, agosto y septiembre.

Emigración

Muchas de esas celebraciones tienen lugar desde hace muchos años, a partir de los años de la emigración. En décadas como las de los años cuarenta, cincuenta o sesenta, cientos de miles de almerienses salieron de la provincia en busca de trabajo y futuro, pero gran parte de ellos regresaban para pasar las vacaciones de verano en su lugar de origen.

Ese fue el origen de las que se dieron en llamar las ‘Fiestas de los Emigrantes’ en las que se celebraba aquel regreso anual, aunque ese retorno apenas durara unas semanas. Esas fiestas se convirtieron en una especie de homenaje a quienes tuvieron que buscar fuer las condiciones de vida que sus pueblos no podían ofrecerles en aquellos tiempos.

El resultado de esa elección por parte de buena parte de los ayuntamientos es la concentración de fiestas locales en los meses de las vacaciones de verano, si bien algunos mantienen sus tradiciones inamovibles como el caso de Bayárcal, que celebra sus dos fiestas locales en el mes de diciembre o el de Almócita, que concentra en el mes de febrero sus dos festivos. Otros como Rágol, Albanchez, Beires, Sorbas o Velefique, al contrario, las celebran en agosto.