La ampliación de la guardería de San Agustín arrancará en julio

“Estamos muy contentos porque  este año más de 30 pequeños se han quedado sin una plaza”. Son palabras del presidente de la Junta Local de San Agustín, Francisco Pérez, quien se mostraba satisfecho con el anuncio ayer por parte del portavoz del equipo de Gobierno, José Francisco Rivera, de que el proyecto de ampliación de la guardería de San Agustín comenzará en apenas dos meses.

Y es que bajo un presupuesto que supera los 183.000 euros y con ayuda de la Junta de Andalucía a pesar de que la obra será municipal, “con esta reforma está previsto que se duplique el número de plazas actuales, pasando de 41 a 81 plazas, lo que permitirá mejorar en gran medida su capacidad, así como ofrecer, de este modo, respuesta a la creciente demanda de plazas infantiles”, apuntó el concejal ejidense.

No obstante, y aunque las obras comenzarán el próximo mes de julio, el plazo de ejecución será de seis meses. Pese a todo, la ampliación permitirá dotar a esta escuela infantil de dos nuevas aulas de 20 plazas cada una, ya que actualmente solo dispone de tres y sin contar además que se integrarán los aseos en las aulas, tal y como exige la normativa. Tanto desde el equipo de Gobierno como desde la propia junta local esperan que las obras no se demoren en el tiempo y que puedan cumplirse los plazos debido a su carácter necesario y urgente teniendo en cuenta la elevada población infantil de 0 a 3 años.

Temporada estival
En otro orden de cosas, la junta de gobierno local también adjudicaba ayer el servicio de balizamiento de playas por un importe total de 11.481 euros, lo que ha supuesto algo más de 30.000 euros de ahorro con respecto al mismo servicio el pasado año, aunque si los datos se comparan con el año 2007, el ahorro alcanza el 84%.

Tibu&Lox será la empresa encargada de este servicio que instalará las boyas cada 100 metros a lo largo de los nueve kilómetros de costa desde la playa de Balerma, Guardias Viejas, San Miguel, hasta las de Poniente y Levante de Almerimar. Un nuevo ejemplo de ajuste municipal llevado a su máxima expresión.