La falta de lluvia y datos para echarse a temblar: 14 litros en lo que va de año

En pleno mes de abril, el verano ya se ha dejado ver en Almería. Los datos hablan por sí solos. Las máximas este martes 16 de abril en algunas localidades almerienses llegaron a rondar los 34 grados. Temperaturas de pleno verano. Incluso, de un caluroso día propio de los meses estivales, pero a mediados del mes de abril.

Algo que podría ser una anécdota, una subida de las temperaturas temporal, se convierte en un verdadero motivo de preocupación cuando deja de ser un día aislado. La clave consiste en que, siempre según los datos, este tipo de picos de temperatura extraordinarios son cada vez más frecuentes. Hasta el punto de que la temperatura media en lo que llevamos de mes está “cuatro grados por encima de la habitual”, según ha confirmado el Observatorio Meteorológico del Almanzora (OMAA), colaborador de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).

Desde este observatorio llaman la atención sobre lo ocurrido este martes pero inciden en que lo relevante se explica con una mirada general y más abierta en el tiempo. “Si lo miramos desde una perspectiva climática, los 34 grados un día de abril es una barbaridad, pero lo es más el valor medio tan alto del mes”, subraya el responsable del OMAA, Juan Jesús Maestre. “Los 34 grados llaman mucho la atención pero en este aspecto hay que mirar la frecuencia. Eso es lo importante, porque cada vez la frecuencia de estos valores puntuales tan altos es mayor, algo que va en paralelo al aumento de la temperatura media”, añade Maestre.

Pero los datos que confirman que algo (o mucho) está cambiando son muchos más. Como ejemplo, en lo que se refiere a las lluvias en algunas zonas de Almería como en algunas puntos de la comarca del Valle del Almanzora se han acumulado desde enero tan sólo 14 litros. Teniendo en cuenta que la media estacional está entre 50 y 100 litros, lo normal es que hubieran caído como mínimo 50 litros. Como mínimo. Pues ni eso. Han caído 36 litros menos de las precipitaciones mínimas que cabían esperar.

“Desde septiembre llevamos solo 26 litros y deberíamos de llevar a estas alturas unos 250 litros”, advierte en cuanto a las precipitaciones el responsable del observatorio almeriense que, antes de concluir, ofrece un último dato que lo dice todo. Y es que, a tenor de las temperaturas registradas en los últimos cincuenta años, “los días de verano en España han pasado de 90 días a 145”.