Los vecinos de Balerma llevan años viendo como el rompeolas de la mar se sitúa cada vez más cerca, si no al acecho, de sus explotaciones agrarias en la zona de las Cuevecillas y en pleno paseo marítimo en el entorno del casco urbano. Y todo esto mientras se suceden estudios y se anuncian plazos que no se cumplen.
Y es por ello por lo que este viernes, 10 de mayo, han decidido trasladar su particular ‘ola de protesta’ hasta la sede provincial de Costas, en un movimiento similar al que llevaron a cabo en diciembre de 2021.
Y una vez emplazados en el Paseo de Almería, vecinos de Balerma y colectivos concienciados ante la dramática situación que vive esta franja litoral han vuelto a hacer mucho ruido y a alzar la voz bajo un lema que vienen repitiendo y, lo peor de todo, constatando durante los últimos años ‘la mar se traga Balerma’.
Manifiesto
Ante las decenas de personas concentradas, llegadas en autobús y coches particulares, se ha leído un manifiesto señalando que “nos sentimos tristes y apenados por ver que el tiempo vuela y que tres años más tarde seguimos aquí, en el mismo sitio, con semejante reivindicación, con semejante lucha y sintiendo que nadie nos escucha”.
Asimismo, al hilo de los estudios puestos en marcha, han reseñando sentirse “engañados, pues los estudios que se están realizando no llegan a su fin. A las puertas del verano, tendremos que conformarnos de nuevo con cuidados paliativos para nuestra playa: descargas de camiones de arena, que lejos de mejorar la situación, la agrava, pues el acceso a la playa se vuelve misión imposible para mayores, jóvenes y niños".
Por otro lado, han dejado claro como “la mar tiene hambre, se come la playa de las Cuevecillas, las explotaciones agrarias, el varadero... y así continuaremos si no se actúa de inmediato”. Y, por todo ello, han vuelto a insistir en pedir “ayuda a las autoridades, a Costas y a la Ministra, pues son los únicos con potestad para solucionar este desastre”.
Proyecto
Cabe recordar que Costas anunció en 2023 como solución integral un proyecto consistente en un muro de 785 metros de longitud y 2,5 metros de altura con la aportación de aproximadamente un millón de metros cúbicos de arena que se extraerán yacimientos marinos. Y, junto a ello, se realizaría la construcción de un espigón de 40 metros de longitud, perpendicular a la línea de costa, situado en la Rambla del Loco.
Sin embargo, los plazos de realización del estudio de esos yacimientos marinos no paran de prorrogarse. Y es por ello por lo que desde el Ayuntamiento de El Ejido se viene abogando por una solución temporal y reversible que sería el uso de sacos geotextiles. Solución que se ha ofrecido a pagar. Pero todo depende de Costas, que es quien maneja el timón.
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