El primer libro sobre unos Moros y Cristianos, de 1919 y ya en manos del pueblo

Cada vez que llega le mes de junio, varios municipios de la provincia de Almería se engalanan para recordar lo sucedido hace siglos, con combates entre tropas moras y cristianas en los que, tal y como ocurrió en realidad, las segundas se llevan el gato al agua. Es el caso de Mojácar, Vera o Carboneras, donde se desarrollan algunas de las celebraciones almerienses de este tipo más populares.

En el caso de los vecinos carboneros, siempre se ha reivindicado con orgullo que se trata de "los Moros y Cristianos más antiguos de la provincia" tal y como ponía en valor su alcalde días atrás coincidiendo con su celebración. Ahora, un libro de 1919 respalda esta reivindicación o, al menos, que se trata de la celebración almeriense de este tipo con los libros dedicados a la misma con mayor antigüedad.

Pese a que se conocía su existencia, no ha sido hasta ahora cuando el Ayuntamiento de Carboneras ha logrado recuperar veinte ejemplares del libro 'La fiesta de Moros y Cristianos en la villa de Carboneras, precedida de una noticia histórica', impreso en Cuevas del Almanzora en 1919 y escrito por Miguel Flores y Ramón de Cala. Los ejemplares adquiridos ya están en el pueblo carbonero y estará a disposición de todos los vecinos e interesados en los mismos por medio de la Biblioteca Municipal, entre otros puntos donde se podrán consultar.

El alcalde de Carboneras, Salvador Hernández, y la concejala de Educación, Mariana Esteban, han visualizado esta adquisición durante un encuentro en el que han agradecido al editor Juan Grima Cervantes que pusiera al Ayuntamiento "sobre la pista de esta obra de la que, hasta donde se conoce, se mandaron a imprimir unos 200 ejemplares", según ha confirmado el Consistorio carbonero.

El regidor ha explicado que los ejemplares con los que se ha hecho “se encontraron inicialmente en un cortijo en Lorca que perteneció a la familia de Miguel Flores y, desde allí, terminaron en la malagueña Alhaurín de la Torre”. “Esperamos que todos los carboneros interesados en la Relación de Moros y Cristianos y en nuestra historia disfruten de este facsímil, del que habrá ejemplares para consulta en la Biblioteca Municipal y que se expondrá también en el Castillo de San Andrés”, ha señalado Hernández.

Para el Ayuntamiento de Carboneras, según ha continuado Hernández, esto “supone una gran alegría contribuir a preservar nuestra memoria y nuestras tradiciones a través del hallazgo de un libro con tanto valor sentimental e histórico para nuestro pueblo”.

'La fiesta de Moros y Cristianos en la villa de Carboneras, precedida de una noticia histórica (Cuevas del Almanzora, 1919)', es un texto que comienza con un preámbulo al que sigue un artículo sobre historia del municipio. A partir de ahí, se da paso a la reproducción del texto que se recrea en la Relación de Moros y Cristianos para, finalmente, concluir con una serie de anexos en los que se encuentran documentos de interés para la localidad, entre ellos el decreto del Obispado nombrando patrón de la villa de Carboneras a San Antonio de Padua en fecha de 29 de abril de 1918.

Miguel Flores González comenzó la investigación para esta obra junto a Ramón de Cala y López a partir del patrocinio del carbonero Simón Fuentes Caparrós, conocido como El rey del Esparto. El destacado miembro de la familia de los Fuentes, tradicionales exportadores de esparto y otros recursos del país como la barrilla, hizo posible que los autores se metieran de lleno en la tradición carbonera.

Los autores
Miguel Flores González (Cuevas del Almanzora, 1879 - Sorbas, 1936) fue hijo de un rico industrial que era socio de Luis Siret en algunas empresas mineras. Historiador y comediógrafo, quizá el más destacado representante de la cultura burguesa cuevana del primer tercio del siglo XX, fue uno de los autores más prolíficos en la historia local y provincial de los años veinte y treinta de ese siglo.

Por su parte, Ramón de Cala y López (Jerez, 1864 - Garrucha, 1936) fue un activo político progresista que militó en el republicanismo federalista y aficionado a la historia local. Estudió Farmacia y abrió un establecimiento en Cuevas del Almanzora, colaborando con Miguel Flores González en varios proyectos.