Muere Fina, la madre de Carboneras que nunca dejó de buscar a su hijo

Cuando se hablaba del 11 de septiembre, a Fina García no le venían a la cabeza los atentados de las Torres Gemelas en Estados Unidos, sino ese mismo día del año 2008 cuando su hijo, Joaquín, desapareció en Carboneras sin dejar pista alguna.

Hoy, más de 15 años después de la desaparición del joven carbonero, también se ha ido y para siempre su madre, Fina García, una mujer que dedicó los últimos años de su vida a encontrar respuestas sobre qué le pasó a su retoño y a la que hoy despide todo un pueblo y las muchas personas que fueron conscientes de su lucha diaria.

Entre ellas se encuentra el periodista y afamado presentador de televisión Paco Lobatón, responsable del programa Quién sabe dónde y quien compartió multitud de momentos junto a la mujer que hoy ha dicho adiós a la vida en Carboneras, el mismo enclave donde se le perdió la pista a su hijo cuando viajaba en una embarcación.

Ha sido el cáncer el que ha terminado con la vida de García tras una dura y larga lucha contra la enfermedad y, ha terminado igualmente, con su incansable búsqueda de respuestas a la multitud de preguntas que le asaltaron desde que el 11 de septiembre de 2008 no volvió a saber nada de su hijo Joaquín.

La desaparición

Ahí comenzó su dedicación exclusiva a dar con el paradero de su hijo o, al menos, con una explicación a lo ocurrido en la noche de ese 11 de septiembre, y también, su trabajo diario para preservar la memoria de Joaquín.

"Recuerdo el primer encuentro con ella en Murcia con motivo de una concentración por la desaparición de Alberto Hernández. Fue el primer eslabón de una trama desde entonces ininterrumpida de Foros y de concentraciones donde se sintió parte de una familia hermanada por la misma incertidumbre y alentada por la misma Esperanza. La que ahora tomará el relevo para continuarla en la reclamación del derecho a un final", ha escrito en su página de Facebook Lobatón, una publicación que ha recibido decenas de reacciones y muestras de cariño para la madre que perdió a su hijo en el municipio carbonero.

Una historia larga y dura que comenzó cuando el joven viajaba en una embarcación acompañado de Juan David, otro joven que fue el único superviviente y que fue encontrado por la tripulación de un pesquero. 

El superviviente llegó a asegurar que al averiarse la lancha habían decidido alcanzar la costa a nado cuando se encontraban a 12 millas de distancia, pero que Joaquín no aguantó la travesía. Ésta fue una de las múltiples versiones que dio el único testigo que estuvo en el lugar de los hechos.

Pero la verdad nunca se supo y la justicia cerró el caso hace ahora ocho años, en 2016, sin responsabilizar a nadie por la desaparición. Es decir, sin respuestas a las preguntas con las que hoy, 6 de julio, Fina se ha ido para siempre.