El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha suspendido
parcialmente el proyecto para las obras de colectores y la nueva
estación depuradora de aguas residuales (EDAR) de Oria para prevenir posibles "daños" y "perjudicios
irreparables" al patrimonio arqueológico y el dominio público
hidráulico de la zona.
En su auto, consultado por Europa
Press, el tribunal estima la petición que efectúa Ecologistas en
Acción tras examinar el proyecto y advertir que el trazado dado a un
colector podría afectar a infraestructuras hidráulicas que datan
del siglo XVI, en concreto, a la mina de agua que abastece a la balsa de Janá, así como a determinadas ramblas.
La Sala de lo
Contencioso-administrativo accede a la medida cautelar a fin de
"asegurar que la futura sentencia -en caso de dar la razón a
los ecologistas- pueda llevarse a la práctica de modo útil, sin
que se produzcan situaciones irreversibles" sobre el
terreno.
El tribunal ha tenido en consideración los
informes sobre los posibles "efectos y afecciones" al
patrimonio cultural y al paisaje agrario que podrían derivarse de
las obras de los colectores, así como el informe técnico sobre la
afección al cauce del dominio público sin que desde la Junta de
Andalucía, tras haberle dado parte, "se contradigan"
dichas observaciones.
Así, el informe de los
especialistas aportado por Ecologistas en Acción incide en la
"insuficiencia" de medidas que el proyecto de la Consejería
de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural prevé para ejecutar
las obras, con las que se "cortaría y amortizaría la galería,
cortándola y rellenándola, lo que es incompatible con su
conservación".
De igual modo, apuntan los
ecologistas que la afección al patrimonio cultural en el caso de la
mina que abastece la balsa de Janá "es extensible al paso de
otros colectores de la EDAR", por lo que dichos proyectos
exigirían "una actividad arqueológica previa" mediante
una prospección o sondeo.
Añaden también que las obras
proyectadas contemplan el paso de dos colectores por la "huerta
histórica de Oria" sin tener en cuenta "la relevancia de
este patrimonio", toda vez que "implican la destrucción
del nacimiento de agua de la balsa denominadas ´La fuente´".
Entre
otras cuestiones, los ecologistas señalan en su recurso la afección
al dominio público hidráulico de distintos colectores que discurren
por ramblas o terrenos adyacentes "sin haber obtenido
autorización", toda vez que echan en falta "alternativas"
dentro del proyecto al trazado para evitar los recorridos propuestos.
Advierten también la "ligera invasión" de la EDAR de la
zona de servidumbre para un periodo de retorno de cien
años.
ESPACIOS CON UN POSIBLE VALOR HISTÓRICO
El
tribunal ha destacado, en este caso, que la paralización cautelar de
parte de las obras tienen como fin preservar de antemano un bien
público. "No se trata de defender un interés particular"
sino que se actúa para la "defensa de espacios que pueden tener
un valor histórico" y que sería necesario "proteger".
En
este sentido, el TSJA ha atendido las alegaciones de los ecologistas,
quienes mediante su escrito trasladaron que "la mina y el
espacio de regadío de Janá son de origen medieval andalusí y
constituyen restos arqueológicos", de manera que si bien
especifican que estos bienes no están inventariados, también
destacan que "no dejan de formar parte del patrimonio
histórico".
Así, aportaron documentos en los que
explicaron que ni el proyecto ni el informe de impacto ambiental
tenía en cuenta "la importancia de ninguno de estos elementos"
así como tampoco "el daño irreversible y a la comunidad de
regantes que conllevaría" la ejecución de los trabajos en las
zonas afectadas.
Por su parte, desde el Gobierno andaluz
se señaló que la paralización de la actuación, que en su conjunto
cuenta con una inversión de casi 2,3 millones de euros y un plazo de
ejecución de 18 meses, produciría "un grave perjuicio al
interés general al no poder ejecutar la Administración obras a la
que está obligada por mandato legal".
Si bien el
TSJA reconoce el "interés público de las obras ejecutar",
ha apuntado que "es claro también el interés público que se
pretende con la medida cautelar", por lo que ha accedido a la
suspensión de las obras de los colectores de las zonas afectadas de
las minas de agua y de las zonas de las ramblas afectadas por el
trazado de los colectores, ya que la protección de estos terrenos
"resulta especialmente relevante" al tratarse de "elementos
arqueológicos".
La obra, de la que el Consejo de
Gobierno tomó conocimiento el pasado 9 de julio, prevé el
tratamiento mediante la EDAR de un caudal máximo de 349 metros
cúbicos diarios, para lo que se servirá de un colector general y
cinco colectores más, que suman casi 5,3 kilómetros de
longitud.
Esta actuación va encaminada a tratar las aguas
de una población total de 2.200 habitantes, tanto de Oria como de su
núcleo de población de Ogarite, ya que el municipio carece de un
sistema de depuración de sus aguas residuales, que se vierten
directamente al medio sin depurar a través de cuatro puntos.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/3/provincia/278021/el-tsja-paraliza-las-obras-de-la-edar-de-oria-por-posibles-danos-al-patrimonio