Agrinature distribuirá una guita biodegradable con la que poder hacer compost

El mayor problema que tiene la gestión de los desechos agrícolas es la separación de los restos vegetales de la rafia (guitas). Es complejo y costoso, tanto para el agricultor como para el centro de tratamiento, incluso el productor tiene que pagar más a la planta de reciclaje si sus residuos van mezclados. Una empresa almeriense, afincada en el polígono de la Juaida (Viator), ha logrado tener en exclusiva la distribución para la próxima campaña de un hilo biodegradable.

“Será el primero que haya en Almería capaz de resistir las condiciones del invernadero porque lo que había hasta ahora era un algodón biodegradable, que se lo comía el sol”, explica Francisco López Ramón, responsable de Agrinature Indálica.

Las posibilidades que abre este nuevo producto son amplias. Por ejemplo, el agricultor que decida hacer autocompostaje con sus restos podrá hacerlo con facilidad; el productor de pimiento y otros cultivos que apueste por triturar sus plantas no tendrá ya el problema de las guitas; y las empresas de reciclaje también tendrán resuelto este problema.

El hilo que se usa tradicionalmente es de material sintético, como la fibra de propileno. La alternativa a este hilo sintético es un hilo biodegradable, que Agrinature comercializará a partir de ahora, y que es susceptible de ser degradado por los microorganismos (bacterias, hongos u otros agentes biológicos). “Y el respeto al medio ambiente que se logra con este hilo es fundamental”, subraya López.

Fondos operativos

Precisamente el compromiso medioambiental que inspira el Real Decreto 1337/2011 recoge como producto subvencionable la utilización de hilo biodegradable, dentro de los programas operativos que reciben las OPFH, Organizaciones Profesionales de Frutas y Hortalizas.

López insiste en este aspecto porque considera que es importante que el agricultor sepa que Europa financia a aquellos productores que apuestan por herramientas de trabajo especialmente respetuosas con el medio.
Incluso el hilo tiene aplicaciones en ganadería, ya que su descomposición facilita el uso de los desechos como cama o alimento.