En El Ejido confluyen numerosas ramblas y cañadas. Gran parte de su núcleo principal y todo lo que es hoy día Ejido Sur está situado en una avenida natural de agua, o lo que es lo mismo, en mitad del camino de una riada.
Para evitar cualquier peligro, por ejemplo las consecuencias de una gota fría, el Ayuntamiento de El Ejido está estudiando encauzar el curso del agua torrencial para impedir que tropezase con los núcleos de población, en el supuesto hipotético de una gran tromba o lluvia torrencial.
Actualmente y a raíz del cambio climático, los fenómenos tormentosos intensos son más probables, con lo cual la posibilidad de una gota fría ahora es mayor que lo era hace unas décadas.
Redacción de un proyecto
“Queremos redactar un proyecto a futuro para un plan de actuación contra avenidas e inundaciones que consiga canalizar las aguas de lluvia en la zona norte de El Ejido y que las correntías no aneguen la zona centro de El Ejido”, explica el concejal de Obras Públicas, Mantenimiento y Servicios, Ángel Escobar, “conseguir que todo el agua de lluvia se canalice antes de entrar en el núcleo urbano”.
Dicho proyecto rescatará unos estudios previos, hechos en su día por la entonces Confederación Hidrográfica del Sur. En ellos ya se contemplaba la canalización hasta la Balsa del Sapo (al sur, en Las Norias) de la rambla de los Aljibillos, situada en la barriada de Pampanico (al norte del municipio bajando desde Dalías), que es una de las que más aporte de agua torrencial enviaría hacia el núcleo de El Ejido en la hipótesis de una ríada de agua.
“También se contemplarían otras actuaciones al norte, por Pampanico, para actuar en forma de paraguas sobre el núcleo de El Ejido y desviar todos los cauces que confluyen sobre el núcleo, o bien hacia Poniente o bien hacia Levante”, describe Dionisio Martínez, jefe de área de Obras Públicas, Mantenimiento y Servicios.
Ya hay unos anteproyectos realizados hace unos años, cuando fueron considerados obras de interés general del Estado, con lo cual hay un compromiso por parte de la Administración central de llevar a cabo esos proyectos. Lo que pretende ahora el Ayuntamiento es impulsarlos y buscar financiación, pese a la crisis.
El agua de los Aljibillos llega de modo natural hasta el paraje El Treinta, junto a Ejido Hotel, así que toda esa zona hasta Santa María del Águila es inundable. “Lo que se pretende es hacer una canalización a partir del cementerio, o un poco por encima, y encauzarla directamente hasta la Balsa del Sapo, encauzamiento planteado como cauce-camino, pudiendo aprovechar también ese cauce como camino”, añade Dionisio Martínez.
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