La uva más temprana de España se recoge en fincas del Poniente

Hoy día la capitalidad de la uva de mesa en España está en Murcia, tanto en producción, como en comercialización como en grupos de investigación. Sin embargo, a la provincia de Almería aún hay que colocarla en el mapa en este sector cuando se habla de la uva más temprana del país. En el Poniente, en zonas de baja altitud, especialmente en los invernaderos de El Ejido donde hay parrales, se recolecta la primera uva del año, roja sin semillas que se recoge en mayo.
Es un cultivo extratemprano porque lo habitual es recolectar la uva en julio, en agosto y en septiembre. Sin embargo, en El Ejido se adelanta la producción casi un mes a Murcia y a otras zonas del Levante español. Después de la roja sin semillas, en El Ejido hay fincas con negra y blanca sin hueso que se recolecta en la primera quincena de junio.
“Gracias a que El Ejido tiene la uva más temprana, podemos venderla bien porque es un momento en el que hay poca uva en el mercado”, explica Antonio Mira, un productor ejidense con seis hectáreas de uva de distintos tipos y variedades, “este año por los fríos de febrero hay menos uva, pero a mejor precio que el año pasado”.
Nostálgicos
“Somos cuatro nostálgicos los que tenemos uva”, comenta José García, de la empresa Frutas Matillas, situada en Celín (Dalías).
Esta familia tiene una larga tradición uvera, de generación en generación. En la actualidad tiene alrededor de cuatro hectáreas de negra y blanca, toda sin semillas. “Con hueso no tiene aceptación”, señala José García.
Su ciclo de producción es más tardío que en el Poniente y El Ejido, debido a la mayor altitud. En Celín recogen desde principios de agosto hasta mediados de septiembre. Esta familia vende a un comercializador de Murcia que a su vez exporta a Alemania.
García cree que esta actividad para ser rentable necesita mucha superficie, “pero aquí la tierra es más cara que en Murcia, y es más rentable tener un invernadero que un parral”.
La mayoría de parrales que sobreviven en Dalías son pequeños bancales, cuya producción queda en el mercado local, en las fruterías y tiendas de la comarca.