El fuerte poniente provoca el rescate de 12 bañistas junto a Aguamarga

El brusco cambio del viento de levante al de poniente en la playa de Aguamarga, en Níjar, sorprendió en la tarde de ayer a doce bañistas que habían ido a nado y en canoa a la Cala Pipica, aproximadamente a una milla de distancia.

Los trabajadores de Protección Civil de la playa de Níjar, que afortunadamente se encontraban en ese momento en la unidad, recibieron la alerta a las 13.55 horas por parte de otro bañista que había visto a estos hacía unas horas alejarse a nado y con una canoa hasta allí sin haber vuelto, a pesar de que el tiempo había cambiado.

De inmediato, Protección Civil dió el aviso y se desplazaron en su embarcación hasta la Cala Pipica. Una vez allí comprobaron que había hasta doce personas que se encontraban en peligro, entre ellas tres niños de entre 7 y 10 años que iban en una canoa acompañados de sus padres.

Hasta tres viajes tuvieron que dar los efectivos de Protección de Níjar con la embarcación hasta Cala Pipica para lograr, por fin, poner a salvo a los bañistas, según informó el coordinador de Protección Civil, Diego Martínez.

Ninguno de los doce bañistas sufrió daños, tan solo unos rasguños, según Martínez. Por lo que fueron una vez más los efectivos humanos de Protección Civil los que los atendieron en tierra.

El rescate duró aproximadamente unos 40 minutos, ya que eran doce personas las que estaban en peligro en ese momento.

Medios empleados
En las tareas de rescate participaron hasta tres socorristas, un coordinador y el subjefe de Protección Civil y la embarcación de la unidad. Además, según cuenta Martínez, contaron con el apoyo de un particular tras pedir su colaboración a través de la radio-teléfono por la que ellos comunican las alertas.

El coordinador de Protección Civil ha explicado que es bastante común que los bañistas vayan a la Cala Pipica y la Cala de Enmedio a nado desde Aguamarga. “algo que es bastante peligroso porque se encuentra a una milla de distancia y como ha ocurrido hoy pueden verse sorprendidos por un cambio brusco del viento en cualquier momento”. A esto se suma que ninguno de los bañistas conocía bien la zona, ya que todos eran turistas.

Martínez ha declarado que ha sido una suerte rescatar a los doce bañistas con vida, ya que en ese momento la mar estaba muy revuelta a causa del viento de poniente y eran muchas las personas, incluidas varios niños pequeños, las que estaban en peligro.