El Ayuntamiento de Mojácar considera que el municipio se encuentra en “una situación límite a causa de la masiva afluencia de jóvenes procedentes de diversos puntos de la geografía española que han tomado el municipio como un inmenso botellódromo, al estilo de los que proliferan en otros lugares de la costa mediterránea”.
Quizás por ello, el botellón y el horario de cierre de algunos loclaes, cuestiones estas que no estaban en el orden del día, sino que aparecieron en los ruegos y preguntas, ocuparon los últimos setenta minutos del Pleno celebrado el pasado jueves.
Según quedó claro en el Pleno, las medidas adoptadas por el Consistorio son infructuosas sobre todo en fin de semana aunque la Policía Local de Mojácar tenga a veces el apoyo de agentes de otros municipios.
Ediles de la oposición y ciudadanos asistentes al Pleno, solicitaron a la alcaldesa, Rosa María Cano (PP), que efectuara las gestiones ante órganos de la Administración competentes en esos asuntos y le reprochó no atajar bien el problema que pone en peligro la economía de un municipio basado en el turismo familiar y de ocio.
Cano comentó que “lo he comunicado a la Subdelegación del Gobierno que decía mostrar su apoyo para erradicar el problema, esperamos que haya sensibilidad al respecto para esa erradicación”
El propio Consistorio reconoce que las medidas adoptadas han resultado ineficaces ante la “avalancha de decenas de miles de jóvenes” que acuden a Mojácar, especialmente los fines de semana, “con el único objeto de divertirse ilimitada y fundamentalmente con el consumo de alcohol y estupefacientes en lugares públicos”.
En este sentido, los dirigentes políticos de la localidad han señalado que la Policía Local lleva “años persiguiendo el ocio etílico callejero de los jóvenes”, de manera que, pese a los “centenares de decomisos de bebidas alcohólicas e innumerables sanciones impuestas, los jóvenes no renuncia al alcohol en plena calle”.
Los miembros de la oposición coinciden en que el horario actual de cierre de establecimientos hoteleros favorece también la aparición del botellón ya que algunos establecimientos deberían cerrar alguna hora más tarde debido a que en esta época las dos o las tres de la mañana es pronto y mucha gente no sabría donde ir; aparte de que hay tres establecimientos que por ley tienen permiso hasta las seis de la mañana. La alcaldesa, Rosa María Cano, argumentaba que cumplía con la normativa vigente.
Multas a los locales
Desde el equipo de Gobierno se insiste en que las medidas disciplinarias también se han adoptado con los establecimientos, a los que se multa cuando “infringen las normas”, lo que no evita la proliferación de “vasos de plástico de litro” y “bolsas de hielo adquiridas en tiendas de alimentación, más económicas que los bares de copas o discotecas”.
Desde los partidos de la oposición se ha exigido al gobierno local que aplique "mano dura" contra el botellón así como que efectúe las gestiones oportunas ante los órganos de la administración competente en estos asuntos, ya que, a juicio de ellos "no ataca bien el problema que pone en peligro la economía de un municipio que se sostiene básicamente en el turismo familiar y de ocio".
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/3/provincia/30302/botellon-situacion-limite