La Ciudad del Taxi es ya una realidad. Después de años hablándose de ella, está en marcha. Inauguró ayer las instalaciones, ubicadas en el Polígono 20 de El Puche en la capital, el alcalde de Almería, Luis Rogelio Rodríguez-Comendador, que destacó que “en tiempos difíciles como estos, la colaboración entre instituciones, como el Ayuntamiento de Almería y la Junta de Andalucía, ha permitido que el taxi de Almería tenga su zona y su espacio para prestar servicios y realizar su trabajo”.
El alcalde recordaba que el terreno ha sido una cesión del ayuntamiento, un solar de 6.000 metros cuadrados por 50 años, con una aportación económica de la Junta para la gestión y construcción de las instalaciones y aportación de los propios taxistas. Rodríguez-Comendador no desaprovechó la ocasión para incidir en “la aspiración del presidente de la Gremial”, que la Ciudad del Taxi “pueda prestar servicio a toda la provincia”. “La unión del sector sería fundamental en todos los sentidos”, dijo.
Por su parte, José Luis Ordoñez, director general de Transporte y Movilidad de la Junta, se mostró contento de que Almería cuente con la que es la sexta ciudad del taxi en toda Andalucía. “El propósito de esta ciudad del taxi es prestar servicio no sólo al ámbito de la ciudad, sino también a toda la provincia. De hecho ya hay poblaciones de fuera de la metrópoli que están funcionando en coordinación con la asociación gremial de Almería”, señaló.
Un logro importante
Y, si satisfacción manifestaban Ayuntamiento y Junta de Andalucía, el presidente de la Gremial del Taxi de Almería, Antonio García Márquez cree que es un paso de gigante de cara a la unión del sector, por los servicios que todos los taxistas pueden obtener con la nueva Ciudad del Taxi y el considerable ahorro en combustible y servicios.
Según García Márquez, el primer objetivo siempre ha sido reducir los gastos de producción, petroleo, combustible -unos 10 a 12 céntimos por litro, el margen comercial que se llevan las gasolineras- y talleres. “También mejorar el servicio de gestoría que se presta al socio y hemos hecho unas oficinas eficientes y montado un equipo para gestión de flota de lo último, para recuperar llamadas y rentabilizar el servicio”, celebró.
Recordaba asimismo el presidente de la Gremial del Taxi que esta Ciudad del Taxi “venía arrastrada de muchos años” y que el paso del tiempo obligó a ser menos ambicioso con el proyecto. “Hubo que cambiarlo y se ha reducido en un 30% del coste -400.000 euros sobre el proyecto inicial-. Nos ha quedado pendiente la cantina”, refirió.
Edificación en dos plantas
La parcela sobre la que se levanta la Ciudad del Taxi dispone de 6.140 metros cuadrados y en ella se ha ejecutado la edificación en una planta, con una superficie de 527 metros cuadrados, de dos edificios bien definidos. Uno de ellos, de unos 227 m2, con estructura de hormigón y una sola planta de altura y cubierta plana no transitable, se destina a la asociación y consta de los espacios necesarios para acoger la función administrativa, de coordinación y encuentro que el sector demanda.
El segundo edificio, de 300 m2, es una nave para taller con un acceso independiente del resto de las instalaciones y que puede funcionar de forma autónoma. Asimismo, las instalaciones auxiliares constan de un surtidor de combustible y dos cabinas de lavado manual de automóviles, así como
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