El mes de julio ha dado un respiro a la crisis de las autoescuelas. Este sector ha sufrido durante los últimos años una caída en picado en el número de matriculaciones, registrando hasta un 50% menos, por lo que muchas han tenido que realizar despidos en sus plantillas para poder hacer frente a la situación actual.
Los calurosos meses de verano han venido como aire fresco entre los empresarios del sector. Y es que con el final de las clases en la universidad y la selectividad, muchos estudiantes se han animado a comenzar las clases para convertirse en futuros conductores.
Según el presidente de la Asociación Provincial de Autoescuelas de Almería (Asproal), Rafael Villegas, en el último mes han tenido que aumentar los turnos de clases teóricas para atender la demanda, pasando de un turno y medio diario a cuatro y cinco en la capital.
En los últimos años, las empresas de enseñanza de la conducción se han visto obligadas a bajar los precios. “En la provincia, una clase práctica cuesta entre unos 25 o 28 euros, IVA incluido, de forma generalizada”, informó Rafael Villegas. En 2008, por ejemplo, una hora superaba los 30 euros.
Ofertas ‘todo incluido’
Las autoescuelas han hecho verdaderos esfuerzos económicos para atraer a los clientes, pero ni las ofertas ‘todo incluido’ de los últimos años han hecho que el negocio vuelva a ser el que era hace cinco años.
Para el presidente de Asproal, estas gangas suponen “el desprestigio del sector”. “No puede ser que algunas empresas ofrezcan matrícula, derechos a exámenes y clases prácticas por 60 euros. Eso es imposible porque de ahí hay que pagarle al profesor que imparte la clase, la seguridad social, el seguro del vehículo...”, explica Rafael Villegas.
Los empresarios de las autoescuelas han tenido que abrocharse bien el cinturón para no derrapar en esta caída sin frenos del sector. “Algunas empresas han despedido hasta el 50% de su plantilla porque no había demanda”, informa Villegas. En la capital, un total de cuatro escuelas han desaparecido por completo en estos últimos años y otras han tenido que cerrar alguna de sus secciones para ajustarse así a esta situación que llevan padeciendo desde hace años.
Afortunadamente, durante estos meses de verano, el sector ha podido remontar, al menos un poco. Según Rafael Villagas, en julio han aumentado los niveles de las matriculas, pero bien es cierto que, respecto a 2011, los datos continúan siendo inferiores. Además, todo apunta a que con la llegada del mes de septiembre vuelva a bajar.
Menos prácticas
El número de matriculaciones ha aumentado en los teóricos, de hecho han tenido que doblar los turnos de clases, pero los datos de otros años hacen pensar que las expectativas para las clases prácticas de conducción no sean no sean tan buenas.
En algunos casos, los estudiantes se quedan en el camino y posponen esta parte para más adelante. Los motivos son muchos: económicos, exámenes en septiembre, vaciones o un trabajo temporal.
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