Desarticulada una red tras volcar la embarcación en la que llevaban la droga

Una operación de la Guardia Civil y la Agencia Tributaria de Málaga contra el narcotráfico desarrollada en Málaga, Melilla y Almería se ha saldado con la detención de once personas de nacionalidades española y marroquí y con la incautación de más de 40 kilogramos de hachís, dos embarcaciones de recreo, medios de localización marítimos y terrestres, diferentes vehículos empleados para el transporte del hachís, un gran número de terminales de telefonía móvil e importante documentación incriminatoria.

La operación, en la que ha participado la Policía Nacional de Almería, ha permitido desmantelar la organización que se dedicaba a introducir importantes cantidades de hachís desde Marruecos y a su posterior distribución por todo el territorio nacional. Durante las distintas fases de la operación se han practicado registros domiciliarios en las provincias de  Málaga y Almería.

La operación  se ha desarrollado durante ocho meses, entre diciembre de 2011 y julio de 2012. Comenzó cuando el equipo de Delincuencia Organizada y antidroga de la Guardia Civil de Málaga (EDOA) y la Unidad Combinada de Vigilancia Aduanera de Málaga,  detectaron  la presencia de una organización que ofrecía “sus servicios” para el transporte de hachís desde Marruecos a España  en dobles fondos practicados en embarcaciones de recreo y su posterior distribución  por el territorio nacional en vehículos, aceptando como pago por dichos servicios parte de la sustancia estupefaciente transportada.

La red contactaba con otras organizaciones para la planificación de los alijos que aquellas, previamente, le habían demandado, de manera que utilizaban una embarcación u otra, según la cantidad de hachís que tenían previsto transportar, cuya carga sería recibida en alta mar.

A raíz de la investigación inicial, en marzo se procedió a la detención de dos miembros de la organización cuando transportaban en un vehículo un fardo de hachís recibido en concepto de pago; posteriormente, en junio se detuvieron otras seis personas vinculadas con la organización y se aprehendieron diez  kilogramos de hachís.
A pesar de los golpes policiales que la organización recibió, no cesó su actividad, proyectando para julio un importante transporte de hachís vía marítima; pero esta última operativa resultó frustrada por un accidente marítimo, ya que el exceso de carga sobre uno de los lados de barco lo hizo volcar y toda la droga se perdió en el mar.